Asturias realizará test a todos los residentes y profesionales en centros de mayores

Asturias realizará test a todos los residentes y profesionales en centros de mayores

El Gobierno de Asturias formará dos comisiones para empezar a planificar la desescalada del confinamiento, que se realizará de forma gradual y progresiva y en coordinación con el Ministerio de Sanidad y otras comunidades autónomas  

 

Asturias.-El consejero de Salud, Pablo Fernández Muñiz, ha ratificado hoy que el Gobierno de Asturias intensificará las medidas para combatir la epidemia del coronavirus en las residencias de personas mayores. “Ya se están realizando pruebas diagnósticas a todos los profesionales y vamos a hacer estas pruebas a todos los residentes”, ha asegurado. La consejería, que ya ha intervenido 54 de estos equipamientos, redobla así sus esfuerzos para prestar la mejor atención posible al grupo de población más vulnerable ante el COVID-19. La consejería también ha designado un coordinador específico para la supervisión de las residencias en cada una de las ocho áreas sanitarias de la comunidad autónoma.  

 

Fernández Muñiz ha asegurado que la atención a las personas mayores ha sido una prioridad desde el inicio de la crisis.  “Son especialmente vulnerables y, desde el primer minuto de esta epidemia, hemos trabajado en coordinación con la Consejería de Derechos Sociales y Bienestar, se ha dado tratamiento adecuado a estos residentes y, a diferencia de lo que sucedió en otros lugares, aquí nunca se ha hecho un cordón sanitario”. A partir de ahora, ha añadido, “se monitorizará lo que ocurre minuto a minuto en estos equipamientos para que, si entra el virus en un centro, se detecte lo antes posible con el objetivo de aislar a las personas afectadas, evacuar a las que lo precisen y dar el tratamiento adecuado a todas ellas”.  

 

Actualmente, Salud mantiene intervenidos 54 centros residenciales. Más de la mitad, en concreto 26, pertenecen a la red privada; otros 15 son públicos y 13 más tienen conciertos con la Administración autonómica. Esta intervención consiste en designar un empleado público para organizar la actividad asistencial. Además, otros 6 centros han sido transformados en dispositivos de atención sanitaria. Se trata de las residencias de San Pedro de Mallecina (Salas), el Centro Gerontológico Jovellanos (Gijón), El Centro Polivalente de Recursos (CPR) Grado, El CPR Naranco y el Centro Residencial Arco Iris (Oviedo) y el CPR Palacio del Villar (Castrillón).    

 

Salud ha nombrado en cada una de las ocho áreas sanitarias a un coordinador específico de centros sociales residenciales encargado de supervisar estos equipamientos. Estos profesionales se suman a los 54 empleados públicos designados como interventores por el Servicio de Salud del Principado (Sespa).  

Anticipación  

 

Las medidas adoptadas por el Gobierno de Asturias, que en muchos casos se han anticipado a las nacionales, han permitido que en la comunidad se registren datos de mortalidad menos negativos que la media del país. Este hecho se constata en los informes del Sistema de Monitorización de la Mortalidad Diaria (MoMo), gestionado por el Centro Nacional de Epidemiología del Instituto de Salud Carlos III, que permite ver la evolución del número de defunciones diarias observadas frente a las esperadas, junto con el número de días consecutivos en los que se registra exceso de mortalidad y la magnitud de dicho exceso.  

 

En el informe publicado ayer, el exceso de mortalidad se sitúa en Asturias en un 31,7% en el período del 20 al 31 de marzo, frente a una media nacional del 67,6%. Esta diferencia se incrementa entre las personas mayores de 74 años. En este caso, el porcentaje en el Principado es del 32,6%, mientras que la media nacional alcanza el 78,6%.  

 

Planificación adecuada  

 

El consejero de Salud ha comparecido acompañado de Sergio Valles, director general de Cuidados, Humanización y Atención Sociosanitaria, y de Mario Margolles, coordinador del Observatorio de la Salud. Entre otros asuntos, también se ha abordado la planificación de la recuperación progresiva de la normalidad o desescalada. Fernández Muñiz ha avanzado que “se crearán dos comisiones de trabajo, una de carácter político, con la participación de varias consejerías; y otra de perfil técnico, que presidirá el director general de Salud Pública, Rafael Cofiño, y contará con expertos de salud pública de la consejería y con asesores externos”.  

 

Fernández Muñiz mantuvo ayer una primera reunión telemática con esta comisión técnica para “poner los cimientos de esta planificación de la desescalada del confinamiento, que debe realizarse de forma gradual, con la coordinación de otras comunidades autónomas y liderados por el Ministerio de Sanidad”. Además, esta reducción gradual de los niveles de confinamiento en España también deberá coordinarse con el resto de países europeos. El consejero también ha anunciado la posibilidad de realizar “pilotajes en zonas localizadas para tener cierta experiencia y compartirla entre las comunidades autónomas”.

Dejar un comentario

captcha