La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, defendió este jueves ante el Pleno del Senado la senda de déficit propuesta por el Gobierno de Pedro Sánchez y avalada por la mayoría absoluta del Congreso de los Diputados, que incluye la flexibilización del objetivo de déficit pactada por el Ejecutivo con Bruselas y que supondría disponer, en los presupuestos de 2019, de 6.000 millones extra para reforzar el Estado de Bienestar.

Montero explicó que esta senda es “rigurosa” y “coherente”, pues mantiene el compromiso de reducir el déficit en nueve décimas, pero partiendo de la cifra real de déficit con la que cerrará 2018, que es superior a la que el Gobierno del PP se comprometió a cumplir al comienzo del ejercicio. En palabras de la ministra, el Gobierno de Rajoy “no hizo sus deberes” y el PP pretende ahora que se corrija “lo que no hizo”, es decir, una “doble tarea” que “no es conveniente”, porque pondría en riesgo el crecimiento y el ritmo de creación de empleo.

Para la titular de Hacienda, el rechazo a esta senda sólo puede entenderse “desde el rodillo del bloqueo”: “A PP y Ciudadanos sólo les importa bloquear al Gobierno, sin importarles los intereses de la ciudadanía”, comentó Montero, que recordó que la mayor parte de esa flexibilización iba destinada a las Comunidades Autónomas y a los servicios que prestan, como la Sanidad, la Educación y la Dependencia. “Vayan a las CCAA y expliquen que no les importa el bienestar de las personas, sino sus cálculos electorales”, insistió.

“Su patriotismo es de quita y pon, de bandera y balcón, de pulsera y cinturón. Pero se equivocan, porque la verdadera patria está en el interés general y en el bien común de las personas, y eso es lo que importa a este Ejecutivo”, subrayó la ministra, quien acusó a la mayoría absoluta del PP en el Senado de “desvirtuar” el consenso de la mayoría de partidos, que aprobaron esta misma senda en el Congreso. “Nunca han creído en el Estado de bienestar ni en el Estado de las autonomías, pero el Gobierno seguirá trabajando para que la justicia social llegue a los ciudadanos”, recalcó.

“El mejor antídoto contra el populismo es que la política se ocupe de los problemas de los ciudadanos por encima de los intereses electorales, la mejor vacuna contra la ultraderecha es la lucha contra desigualdad”, agregó Montero, quien afirmó que esta senda de déficit es la de “la recuperación de los derechos que nos arrebataron durante la crisis” y subrayó el compromiso del Gobierno para hacer llegar la mejora que ya se advierte en las cifras macroeconómicas al conjunto de la población: “Tenemos ese compromiso y lo vamos a cumplir”, concluyó.

Claves para entender la tramitación de la senda de déficit:

El Congreso aprobó el jueves pasado la senda de estabilidad propuesta por el Gobierno con el voto de la mayoría absoluta de la Cámara.

Tras rechazarla el Senado, el Gobierno presentará las cuentas de acuerdo a la anterior senda, aprobada por el Ejecutivo de Rajoy y que supone 6.000 millones de euros menos para el Estado de bienestar.

Cuando el Senado enmienda o rechaza una ley aprobara por el Congreso, la norma vuelve a la Cámara Baja para la votación final, tal como establece el artículo 90.2 de la Constitución Española.

La tramitación de la senda de estabilidad es una excepción, ya que el PP la reformó en 2012 y le arrebató al Congreso la capacidad de revertir las enmiendas y vetos del Senado. La Cámara Alta, por tanto, es la que aprueba o rechaza de forma definitiva la senda.

El grupo socialista ha iniciado en el Congreso el trámite para modificar esa excepción y para devolver al Congreso la última palabra en esta materia. Sin embargo, PP y Ciudadanos, con su mayoría en la Mesa, están bloqueando esta reforma.

Por ello, el PSOE presentó este jueves un recurso ante el Tribunal Constitucional para que se desbloquee esta reforma.