La última FIDMA antes del AVE abre puertas

La última FIDMA antes del AVE abre puertas

El presidente asegura en la inauguración de la Fidma que la llegada del AVE y el posible reconocimiento de la cultura sidrera como patrimonio de la humanidad “van a quebrar el espinazo al aislamiento del Principado”

 

Gijón/Xixón.-El presidente del Gobierno de Asturias ha asegurado hoy que la próxima llegada del AVE a la comunidad y el posible reconocimiento de la cultura sidrera como patrimonio inmaterial de la humanidad ayudarán a “quebrar el espinazo al aislamiento del Principado”. Además, ha animado a reflexionar sobre “la nueva realidad” que implicará la puesta en marcha de la alta velocidad ferroviaria: “Nuestra meta no puede limitarse a marcar una fecha de estreno en el almanaque, sino a prepararnos para sacarle el máximo partido posible desde todos los puntos de vista”.

Adrián Barbón ha intervenido en el acto inaugural de la 65ª edición de la Feria Internacional de Muestras de Asturias (Fidma), donde ha asegurado que en los últimos tres años la comunidad “ha ofrecido una lección continua de capacidad para adaptarse y superar las dificultades”. “Entre todos y todas hemos puesto lo mejor de Asturias en el escaparate. Hasta tal punto, que el Principado se ha convertido durante este trienio en modelo estatal en la gestión sanitaria, en uno de los destinos turísticos más apetecidos de España y en ejemplo de iniciativa para aprovechar la doble transición ecológica y digital, la nueva reindustrialización”, ha argumentado.

Tras repasar indicadores como la evolución del PIB, las cifras del paro de julio, el balance turístico del primer semestre, las exportaciones de enero a mayo y la gestión de los fondos europeos, el jefe del Ejecutivo ha precisado que “hablar bien de Asturias no es sinónimo de triunfalismo”, sino el “reconocimiento de la capacidad demostrada por industrias y empresas para convertir la transición ecológica y digital en una oportunidad”.

En cuanto a los retos para los próximos meses, ha enumerado cuatro: recortar la burocracia, consensuar un nuevo presupuesto centrado en la juventud, el reto demográfico y el empleo de los fondos europeos; poner en marcha la Agencia de Ciencia, Competitividad Empresarial e Innovación y aprobar el proyecto de ley de reto demográfico.

A continuación se reproduce la intervención íntegra del presidente:

Inauguración de la 65ª edición de la Feria Internacional de Muestras de Asturias

Agradezco un año más su invitación a participar en la inauguración de este certamen. Mi enhorabuena a la Cámara de Comercio de Gijón y mis mejores deseos para las próximas semanas. Apuesto sobre seguro porque estoy convencido de que la Feria de Muestras volverá a ser un éxito de ventas y público.

En agosto de 2019 intervine por primera vez desde esta tribuna. Era un presidente recién estrenado con apenas dos semanas en el cargo, casi un debutante con la mochila repleta de esperanzas e ilusiones. Recordarán que en aquel discurso animé a la patronal, a las cámaras de comercio y a todas las asociaciones relacionadas con la actividad empresarial a “poner en el escaparate lo mejor de Asturias, que es mucho”.

En realidad, era un llamamiento a la sociedad asturiana entera. Recuerdo bien por qué lo hice. En aquel entonces –hoy parece que haya pasado mucho tiempo- cundía el temor a que la industria y, con ella, la actividad económica, languideciesen asfixiadas por las exigencias de la transición ecológica.

Si hubiéramos sabido que además íbamos a vivir sin solución de continuidad la pandemia, la escasez de materias primas, la invasión de Ucrania y el retorno inesperado de una inflación desbocada, no quiero ni imaginarme los augurios de la cofradía del pesimismo: poco menos que nos habrían anunciado el fin del mundo a fecha fija, como esas sectas que van cambiando el calendario según van fallando en sus pronósticos.

Sin embargo, y pese a esta concatenación de adversidades, hemos sacado a la luz lo mejor de Asturias. Empleo el plural porque es un éxito colectivo, no un logro exclusivo del gobierno. Hace una temporada que está de moda recurrir a la palabra resiliencia. Pues bien, esta legislatura Asturias ha ofrecido una lección continua de capacidad para adaptarse y superar las dificultades.

Últimamente me he aficionado a la expresión “dato mata relato”. Se entiende a la primera y es contundente. Voy a citar unos pocos números que avalan mis palabras:

  •  Evolución del PIB. El lunes conocimos las estimaciones de la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal sobre la evolución del Producto Interior Bruto de Asturias en el segundo trimestre del año. Según ese cálculo, aumentó un 6,1% respecto al mismo período de 2021. Es un dato muy positivo, un crecimiento económico potente y por encima de los correspondientes a la mayoría de países europeos. En España, únicamente superan al Principado las comunidades más turísticas.
  • Empleo. El martes se publicaron los datos de paro registrado en julio: 58.706 personas, la cifra más baja desde noviembre de 2008. Si lo comparamos con otros meses de julio, desde hace 14 años no teníamos una referencia similar. No obstante, resulta aún más significativo el incremento de afiliaciones a la Seguridad Social. Actualmente tenemos 378.645 cotizantes, un listón que no alcanzábamos desde septiembre de 2011.
  • Turismo. Todos los registros nos invitan a pensar en grande, en un verano en el que Asturias se consolidará a la cabeza de los destinos del norte. En el primer semestre nos visitaron 823.092 personas, un 144% más que el año pasado, y además superamos un récord: el turismo internacional rebasó por primera vez las 300.000 noches de estancia.
  •  Exportaciones. Entre enero y mayo, las exportaciones crecieron un 27,3% respecto al año pasado. Es un aumento más que notable, si tenemos en cuenta que en 2021 Asturias ya había sido la segunda comunidad donde más se habían elevado las ventas al exterior, hasta el punto de que el valor de las exportaciones alcanzó la cifra más alta de toda la serie histórica: 5.188 millones.
  • Fondos europeos. Contra todas las dudas, Asturias es la segunda comunidad más ágil en la gestión de estos recursos extraordinarios. Por el momento, la cuantía asignada al Principado asciende a 523,2 millones. Hasta ahora, hemos cobrado 391,4 millones (74,82%) y se han licitado o convocado 157 millones (el 40,1% de lo que ya hemos cobrado).

La mayoría de ustedes ejercen labores empresariales. Saben que estos indicadores no deben tomarse aislados, sino como piezas de un mismo mosaico.   En este caso, la imagen que componen es la de una potente recuperación de la actividad y el empleo.  Permitan que insista en la reflexión anterior: si hubiéramos sabido de antemano todas las dificultades que iban a sobrevenir esta legislatura, nadie se creería que hoy pudiésemos ofrecer esos números.  Todos los pronósticos habrían sido más negativos.

A estas alturas, necesito hacer una puntualización. Cuando planteo este tipo de consideraciones no embosco los problemas que hay ni los que pueden ocurrir. Sería un insensato si lo hiciera cuando sabemos que se avecinan meses duros, lastrados con el plomo del aumento de los precios.

Tendría el corazón seco si no reparara en todas las personas sin trabajo, en quienes apenas llegan a fin de mes, en los sectores y empresas con dificultades, en el reto demográfico o en los múltiples nudos que debe desatar la Administración autonómica para mejorar su atención a la ciudadanía, desde la atención primaria a la agilidad con las ayudas que necesitan los más vulnerables. La empatía es una exigencia para un gobernante. Cuando hay personas pasándolo mal, la primera obligación es saber ponerse en su piel, sentir como propias su angustia y su incertidumbre. No hay política sin buena gestión, pero no hay buena política sin alma, y en mi gobierno somos muy conscientes de ello.

Me reivindico como un presidente con alma.

Pero, por más que se critique, hablar bien de Asturias no es sinónimo de triunfalismo, como protestan quienes se disgustan cuando nuestra comunidad recibe buenas noticias. Reconocer la capacidad demostrada por nuestra industria y nuestras empresas para convertir la transición ecológica y digital en una oportunidad es sólo constatar la realidad. Me gustaría que alguien se tomase la molestia de sumar los planes inversores en marcha porque comprobaría hasta qué punto estamos en una fase de dinamismo. La descarbonización de Arcelor, los planes de EDP, del grupo TSK o la próxima activación de la regasificadora de El Musel son algunos ejemplos, por limitarme a proyectos con repercusión directa sobre Gijón.

Sí, entre todos y todas hemos puesto lo mejor de Asturias en el escaparate. Hasta tal punto, que el Principado se ha convertido durante este trienio en un modelo estatal en la gestión sanitaria, en uno de los destinos turísticos más apetecidos de España y en un ejemplo de iniciativa para aprovechar la doble transición ecológica y digital, la nueva reindustrialización.

Añado otra precisión: no estoy haciendo un balance del mandato; entre otras razones porque no se ha iniciado siquiera el tiempo de descuento. Esta es una de las ideas que deseo recalcar. Si la gestión empresarial no se detiene, si los problemas de la ciudadanía no toman vacaciones, si el otoño y el invierno se presentan amenazantes, mi gobierno tampoco va a consentirse descanso.

Son muchos los retos que tendremos que superar. Enumero cuatro que son apremiantes:

  •  El primero, seguir recortando la burocracia para facilitar la actividad empresarial, con leyes como la de calidad ambiental y empleo público.
  •  El segundo, negociar y consensuar un nuevo presupuesto centrado en la juventud, el reto demográfico y el empleo de los fondos europeos. Espero, sinceramente, que la responsabilidad se imponga a las tentaciones partidistas y Asturias cuente en 2023 con el presupuesto que necesita. La coyuntura preelectoral no va a allanar el acuerdo, pero el gobierno va a buscarlo con todas sus fuerzas.

Hago un inciso en referencia a la juventud. Una de nuestras mayores preocupaciones es adecuar la formación a las necesidades laborales, y en ese objetivo la FP adquiere una relevancia creciente. Asturias, que ya tiene una de las ofertas formativas más amplias de España, contará aquí, en Gijón, con un centro de innovación en FP que contribuirá a modernizar estas enseñanzas. Con la ministra de Educación presente, no puedo desperdiciar la oportunidad de solicitarle la máxima colaboración posible para fortalecer una de las mejores vías de acceso al mercado laboral. En este acto, tengo que subrayar que es un esfuerzo que concierne también a la iniciativa privada. No podemos permitirnos que queden puestos de trabajo sin cubrir porque no haya jóvenes con la formación adecuada para desempeñarlos.

Tenemos que comprometernos a cerrar con urgencia la brecha entre la demanda y la oferta laboral.

  •  La tercera prioridad es poner en marcha la Agencia de Ciencia, Competitividad Empresarial e Innovación, para reforzar nuestro compromiso con el desarrollo científico y tecnológico, que ya está transformando el paisaje empresarial de Asturias.
  •  Y, por último aprobar el proyecto de ley de reto demográfico, un texto que debe servir de base para un pacto de estado sobre esta materia. La evolución demográfica no se resuelve con pócimas milagrosas ni de un día para otro: necesita la confluencia y estabilidad de muchas líneas de trabajo. Por eso es tan relevante alcanzar un acuerdo amplio y permanente.

Debo detenerme, además, en el contenido del pabellón del Principado, que enlaza la cultura sidrera con la próxima llegada de la alta velocidad. La sidra identifica Asturias como ninguna otra bebida. Es una tradición y es futuro, como saben los cosecheros, productores y todo el ámbito empresarial ligado a su elaboración, distribución y consumo. Por su singularidad, tenemos muchas razones para confiar en que la Unesco reconozca la cultura sidrera como patrimonio inmaterial de la humanidad.

Será un hito en la historia de Asturias, como también lo será el estreno del AVE a través de la variante de Pajares. De ahí que hablemos de “conexión natural”, de un vínculo entre la distinción de una de nuestras manifestaciones culturales más características y un paso de gigante en el desarrollo de nuestras comunicaciones.  

Vamos a quebrar el espinazo al aislamiento del Principado porque ambos multiplicarán la proyección exterior de Asturias. Esa será la consecuencia de la conexión natural.

Esa es la nueva realidad que tenemos al alcance de la mano. Como presidente, animo a que seamos conscientes de lo que vamos a lograr y de las oportunidades que se nos presentan. Estoy obligado a reclamar que el AVE se ponga en marcha en el plazo previsto, pero también tengo el deber de pensar bastante más allá de ese momento.

Les invito a que participen y colaboren en esa reflexión. Nuestra meta no puede limitarse a marcar una fecha de estreno en el almanaque, sino a prepararnos para sacarle el máximo partido posible a la alta velocidad ferroviaria desde todos los puntos de vista. Cito dos ejemplos obvios:

  •  Las circunstancias internacionales están reforzando los puertos de El Musel y Avilés. La entrada en servicio de la variante, sumada al funcionamiento de la regasificadora y al desarrollo de la Zona de Actividades Logísticas, la ZALIA, va a aumentar notablemente ese potencial. Ministra, alcaldesas, presidentes de ambos puertos: si hacemos las cosas bien podemos convertir Asturias en la capital logística del Cantábrico. No voy a renunciar a esa ambición.
  •  El mismo planteamiento vale para el turismo. Antes cité los últimos datos, elocuentes por sí mismos.Como acabo de advertir sobre la logística, el AVE elevará el atractivo de Asturias durante todo el año. Con la alta velocidad ferroviaria vamos a entrar en otra dimensión turística, un avance que habremos de gestionar en continua colaboración con el sector.

Concluyo. Al principio, recordé mi primera intervención en este certamen. Como habrán comprobado, tres años después, y pese a la dureza de este mandato, mantengo la mochila repleta de esperanzas e ilusiones, al igual que el primer día. Audacia, esperanzas e ilusiones fundadas, sumadas eso sí a más conocimiento y experiencia, componen el equipaje adecuado para recorrer los tiempos que nos aguardan. En especial, si todos y todas continuamos dispuestos a poner lo mejor de Asturias en el escaparate, tal y como hará esta nueva edición de la feria de muestras. Gracias de nuevo a quienes contribuyen a convertir la Fidma en una referencia obligada y un ejemplo de buen hacer.

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