Si en un proceso de separación o divorcio los jueces intervinen para garantizar los derechos de los niños por encima de todo ¿por qué no se hace lo mismo con la maternidad subrogada?

Si en un proceso de separación o divorcio los jueces intervinen para garantizar los derechos de los niños por encima de todo ¿por qué no se hace lo mismo con la maternidad subrogada

Estos días corren ríos de tinta sobre el caso más mediático de maternidad subrogada de la historia de España. Y todo el mundo habla de los derechos que asisten a Ana Obregón y, desde hoy, los de su tristemente fallecido hijo Alex Lequio. De sus deseos, de sus proyecciones, de cómo tienen derecho a tener descendencia, de ser madres, abuelas, padres póstumos... Si en nuestro ordenamiento jurídico, cuando hay un menor de por medio, el objetivo supremo a proteger son los derechos de ese menor, y los jueces y fiscales portegen al menor por encima de cualquier deseo de sus propios padres, ¿creemos que en este caso mediático alguien está considerando, desde le punto de vista legal, la protección de los derechos de la niña que acaba de nacer? Vamos a repasar cómo se procede en un caso de separación o divorcio en España. Ahí dan igual los deseos, las frustraciones, los sueños que tengan los progenitores. El niño es niño por encima de lo que pretendan hacer con él sus padres. Y luego vamos a ver los derechos básicos que asisten a un niño que nace por maternidad subrogada. ¿Debe ser legal que una persona adulta cree un niño por un deseo aunque este sea noble en su planteamiento? ¿Debe de intervenir de oficio el ordenamiento jurídico para garantizar el bienestar de ese niño por encima de los deseos personales de los que deciden traerlo a la vida?

 

Cómo actúa el sistema judicial para proteger al niño en un proceso de divorcio en España

En cualquier proceso de separación o divorcio, la figura de los niños es de suma importancia y debe ser la principal preocupación de todas las partes involucradas, incluyendo al juez encargado de resolver la situación. ¿Por que los derechos de los niños deben ser protegidos y cómo puede hacerse efectivo este objetivo? Lo exponemos a continuación

En primer lugar, los niños son la parte más vulnerable en cualquier situación de separación o divorcio. Ellos pueden sentirse confundidos, ansiosos, asustados o incluso culpables por la situación que están viviendo, y es responsabilidad de los adultos protegerlos y garantizar que no sufran daño alguno durante el proceso. Los niños pueden sufrir problemas emocionales y psicológicos a largo plazo si no se les presta la atención adecuada durante un momento tan difícil de sus vidas.

Por esta razón, el juez debe velar por los derechos de los niños de manera prioritaria, teniendo en cuenta siempre su bienestar. En muchos casos, esto puede significar tomar decisiones difíciles, como establecer un régimen de visitas o una custodia que pueda parecer injusta para una de las partes involucradas, pero que se considera la mejor opción para el niño.

Además, el juez debe considerar los deseos y necesidades del niño siempre que sea posible. Los niños deben tener una voz en el proceso y se les debe permitir expresar sus sentimientos y opiniones, siempre que se haga de manera adecuada y respetuosa. La escucha activa y empática del juez hacia el niño puede marcar una gran diferencia en su bienestar emocional y en su capacidad para adaptarse a los cambios que se producirán.

Otro aspecto importante es la continuidad de la vida cotidiana del niño, especialmente en términos de educación, actividades y relaciones familiares. El juez debe asegurarse de que se mantengan estas rutinas y que el niño tenga acceso a la atención médica, la educación y el apoyo emocional adecuados.

Por último, el juez debe estar abierto a la posibilidad de buscar ayuda profesional para el niño y su familia si se considera necesario. Los terapeutas, consejeros y otros profesionales de la salud mental pueden desempeñar un papel clave en la adaptación del niño a los cambios y en la prevención de problemas a largo plazo.

 La protección de los derechos de los niños es una responsabilidad crítica en cualquier proceso de separación o divorcio. El juez debe considerar el bienestar emocional, físico y psicológico del niño en todo momento y tomar decisiones basadas en los mejores intereses del niño. Al hacerlo, el juez puede ayudar a garantizar que los niños involucrados en el proceso de separación o divorcio puedan salir adelante de manera segura y saludable.

 

Los derechos de un niño en casos de maternidad subrogada

La maternidad subrogada es un proceso en el que una mujer, conocida como "madre sustituta", lleva a término un embarazo en nombre de otra persona o pareja, conocidos como "padres intencionales". Si bien este proceso puede ayudar a las personas que tienen dificultades para concebir o llevar un embarazo a término, es importante tener en cuenta los derechos de los niños que nacen a través de la maternidad subrogada.

En primer lugar, es importante señalar que los derechos de los niños que nacen a través de la maternidad subrogada varían según el país y la legislación en la que se lleve a cabo el proceso. En algunos países, como Estados Unidos, existen leyes que protegen los derechos del niño y garantizan que sean tratados como cualquier otro niño, independientemente de cómo hayan nacido. En otros países, la maternidad subrogada no está permitida o se considera ilegal, lo que puede crear problemas legales y éticos para los padres y el niño.

En términos generales, sin embargo, hay varios derechos que deben protegerse en cualquier proceso de maternidad subrogada. En primer lugar, el niño tiene derecho a conocer sus orígenes biológicos y tener acceso a su información médica y de salud. Esto puede ser especialmente importante si el niño desarrolla problemas de salud que requieren información específica sobre su historial médico y sus antecedentes familiares.

En segundo lugar, el niño tiene derecho a ser criado en un entorno seguro y amoroso, independientemente de cómo haya sido concebido. Los padres intencionales tienen la responsabilidad de proporcionar un hogar seguro y estable para el niño y garantizar que reciba el amor y la atención que necesita para prosperar. Esto también incluye el derecho del niño a tener una identidad y un sentido de pertenencia a su familia y comunidad.

En tercer lugar, el niño tiene derecho a la protección legal y la igualdad de derechos. Esto significa que el niño debe tener acceso a la educación, la atención médica y otros servicios públicos que se le proporcionarían a cualquier otro niño. También significa que el niño debe tener los mismos derechos y protecciones legales que cualquier otro niño, independientemente de cómo haya sido concebido o quiénes sean sus padres.

En resumen, los derechos de los niños que nacen a través de la maternidad subrogada son importantes y deben protegerse en cualquier proceso. Los padres intencionales tienen la responsabilidad de garantizar que el niño tenga acceso a su información médica y de salud, se críe en un entorno seguro y amoroso, y tenga acceso a la protección legal y la igualdad de derechos. Al proteger estos derechos, podemos garantizar que los niños que nacen a través de la maternidad subrogada tengan las mismas oportunidades y el mismo acceso a la felicidad y la prosperidad que cualquier otro niño.

Dejar un comentario

captcha