Para navegar en la crisis

Compra y crece, durante la crisis, que todo te resultará más barato y ensancharás el ámbito de tu empresa.

No te encojas. Si lo haces, serás cada día más pequeño y serás ínfimo a la salida de las dificultades. Crece y cuando los demás salgan como niños, tú serás empresarialmente adulto.

No te retraigas. Emprende. Que la gente, tu pequeño ejército empresarial, se apoye en tu confianza, aunque no sea más que aparente. Ensaya sin cesar. Ahora tienes tiempo. Cuando llegue la distensión, estarás en forma, tendrás la musculatura preparada, podrás sentirte más rápido y más fuerte, en definitiva, más capaz.

Para recortar gastos –es siempre mucho más importante generar nuevos ingresos que disminuir gastos-, pero para reducir gastos, no se te ocurra minorar retribuciones. Mejor, llegado el caso, será que cierres. Tu ejército, esa familia agnaticia que depende de ti, no puede perder su confianza en tu capacidad, que es cabecera de la suya.

Hazte mayor y más fuerte. Como quieras o como puedas. Crece tú o asóciate para crecer. A la salida de las crisis, te esperan gigantes, disfrazados de molinos, y tú solo no podrás enfrentarte con ellos, salvo que o tengas su tamaño, o la honda de David o la astucia de Ulises. En cualquier caso, en tamaño, en herramental o en habilidad, tendrás que haber crecido. Escoge el modo, pero hazte en uno de ellos o el mejor o el mejor posible.

Pon tu horizonte más allá del horizonte, porque más allá del horizonte hay más espacio.

Lo posible lo alcanza casi cualquiera, empéñate en lograr una parte de lo que parecía imposible, porque muy poco de lo imaginable es imposible.

Cuando te parezca que agotaste la materia prima, manda aprovechar los que parecen residuos desechables y cuando se te acaben, usa las cenizas, pero no cejes ni en buscar lo nuevo ni en aprovechar lo antiguo.

Y cuando llegues al límite, pero realmente al límite de tus fuerzas, pon tu confianza en el buen padre Dios y ofrécele tu colaboración para hacer lo que no sabías que puede hacerse todavía un poco más allá.



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