El cierre de Spanair

El sorpresivo cese de actividad de la compañía Spanair, seguido casi de forma inmediata de la presentación del concurso voluntario de acreedores y acto seguido de un E.R.E. para toda la plantilla, pone de manifiesto que todas estas iniciativas venían preparándose con total opacidad para el mercado y usuarios, Administración, trabajadores y proveedores y acreedores por los órganos de Gobierno y Administración de Spanair. De igual manera, las causas que han originado esta situación de insolvencia, no son actuales ni sobrevenidas.

 

Todo lo contrario, las causas que han desencadenado el cese de actividades tienen su origen en hace bastantes meses y han sido silenciadas por la compañía para buscar el factor sorpresa y perjudicar a terceros que, guiados por la buena fe siguieron apostando por ella, de ahí que deba examinarse, en la sede del concurso y en aquellas instancias que los perjudicados consideren adecuadas, la actuación de los miembros del órgano de Administración por si pudiera imputársele negligencia grave o dolo. No resulta creíble que entre el día 27 de enero, viernes aproximadamente a las 22:00 horas y el día 30 de enero lunes, no solo se ha conseguido preparar un concurso de acreedores, sino un ERE y la recolocación de las aeronaves en otra compañía aérea, se supone que con la negociación previa con los propietarios de las mismas. Todo ello solo es posible si venía preparándose con la connivencia de las compañías aéreas potencialmente beneficiadas, desde hace bastante tiempo, toda esta batería de medidas, para que se pusieran en marcha de forma simultánea.



1 comentario

  • # Carmen C. B. Responder

    19/10/2014 11:46

    me gusta el deporte femenino

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