¡Ay, cielinos! Hoy la abuela Balbina vos trae una receta que ye de rechupar los dedos, de les que cuando acabes vas querer pasar el pan pela sartén... ¡y hasta pela cazuela si me apuráis! Prestad atención, que esto ye una delicia de las grandes: pasta con crema de nueces y queso peral asturianu. Una receta que combina el sabor recio del nuestru queso azul con la suavidad de la nuez y la cremosidad que tanto nos presta.

Queríes una receta de domingo, de quedar bien con la familia o con esa persona que os hace tilín…? Pues esta ye. Aquí va como la preparo yo, con amor y sin prisas.

Ingredientes (pa 2 persones con fame de verdad)

• 200 g de pasta (la que tengáis a mano, pero a mí prestame el rigatoni)

• 100 g de queso peral asturianu (con carácter, como yo)

• Un puñadín de nueces peladas (y si son del árbol de casa, mejor que mejor)

• 100 ml de nata líquida pa cocinar

• Media cebollina (opcional, pero yo punxóla que da buen sabor)

• Sal y pimienta negra recién molida

• Un chorrín d’aceite d’oliva virgen extra (de ese del bueno, del que huele a monte)

• Un poco de canónigos o brotes pa decorar (esto ye pa quedar como chefs en la tele)

Pasu a pasu, sin correr pero sin dormise

1. Preparar la pasta: Ponemos una pota con agüina y sal, y cuando hierva, echamos la pasta. Remexemos y cocemos hasta que quede al dente. Luego escurrimos y reservamos.

2. Friximos la cebolla (si la usáis): En una sartén con un poco d’aceite, pochamos la cebolla hasta que quede transparente y tierna. Si no vos gusta, saltái esti pasu.

3. La salsa gloriosa: Echamos la nata a la sartén y cuando empiece a calentar, añadimos el queso peral cortáu en cachinos. Remexemos hasta que se funda y quede una cremita fina.

4. Añadimos las nueces: Partimos unes poques con la mano y echámosles a la salsa. Dejamos que cueza todo xunto un par de minutos más. Probamos y salpimentamos al gustu.

5. Mezclar y emplatar: Añadimos la pasta a la sartén y remexemos bien pa que se empape de la salsa. Emplatamos, echamos unes nueces enteres por enriba y decoramos con brotes o canónigos si queremos lucirnos.

Conseyu de la güela Balbina

Esta receta gana puntos si el queso ye de la tierrina, d’esos que huelen fuerte y saben aún más. Y no vos cortéis con les nueces, que son corazón del plato. Si vos apetez una copa de sidrina al lao, ¡mejor que mejor!

Y con esto, cielinos, quedáis servíos y bien contentos. Que esta receta vos caldee l’almín y vos llene la tripina. No dexeis de cocinala y, si la facéis, mandádme una foto que me presta ver lo que faéis por el mundo.