La Fundación Oso Pardo se opone a la implantación de parques eólicos en Cangas de Narcea, Somiedo y Tineo por sus impactos negativos sobre el medio ambiente y la biodiversidad

La Fundación Oso Pardo se opone a la implantación de parques eólicos en Cangas de Narcea, Somiedo y Tineo por sus impactos negativos sobre el medio ambiente y la biodiversidad

Moncho Varela / Redacción / AM

Imagen: Parque Natural de Somiedo / Wikimedia Commons 

 

La entidad ha solicitado a las administraciones estatal y asturiana la inadmisión a trámite de los proyectos "Carola", (90 MW), "Chagüetos" (60 MW) y Gobia (100 MW), al encontrarse la solicitud de autorización administrativa previa y de evaluación ambiental de los mismos en fase de información pública, tal como apareció publicado en el BOE del pasado 19 de febrero.

 

Según indica la Fundación Oso Pardo (FOP), estos proyectos forman parte de un conjunto de cinco parques eólicos situados muy próximos propuestos por la misma mercantil (Green Capital Development XIII, S.L.), y con infraestructuras comunes de acceso y evacuación eléctrica, por lo que "han de ser considerados como una actuación única" a efectos de valorar su impacto sobre la biodiversidad, hábitats, Red Natura 2000 o paisaje.

 

Para la FOP, "estos parques eólicos no deberían ser aprobados y ni siquiera sometidos a tramitación porque no cumplen con la normativa asturiana vigente", ya que su ubicación propuesta se encuentra dentro de la denominada "zona de exclusión eólica" establecida en las Directrices Sectoriales de Ordenación del Territorio para el aprovechamiento energético en Asturias. Por este motivo, consideran que se trata "de un uso prohibido" pues la exclusión viene motivada entre otras razones porque se encuentran dentro del área de distribución del oso pardo cantábrico y muy próximos a varias áreas críticas para la especie, incluyendo además aerogeneradores e infraestructuras dentro de varios espacios de la Red Natura 2000 y de los parques naturales de Somiedo y de Fuentes del Narcea, Degaña e Ibias, zonas cuyos instrumentos de gestión establecen la prohibición taxativa de este tipo de infraestructuras.

 

Desde la Fundación se apunta que "el impacto ambiental de estos parques eólicos es severo, no sólo individualmente sino también en conjunto" al ubicarse "en cordales montañosos de alta calidad para el oso pardo", lo que provocarían, además de un "enorme impacto paisajístico", un "incremento de accesibilidad y una pérdida de la calidad y tranquilidad necesarias, con el correspondiente efecto barrera pra el oso y otras especies".

 

RENOVABLES SÍ PERO NO A CUALQUIER PRECIO

 

La FOP manifiesta que apuesta de manera clara por las energías renovables y los compromisos adquiridos a nivel estatal para hacer frente al cambio climático, pero considera igualmente que es imprescindible "realizar una cuidadosa evaluación ambiental estratégica de las nuevas propuestas energéticas" y que "los parques que se aprueben se ubiquen en los lugares en los que su impacto ambiental se amenor, excluyendo en todo caso el área de distribución del oso pardo y los espacios de la Red Natura 2000".

 

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