Una guía pionera propone adaptar los puestos de trabajo para más de 100.000 personas en España con Sensibilidad Química Múltiple y Electrosensibilidad

Una guía pionera propone adaptar los puestos de trabajo para más de 100.000 personas en España con Sensibilidad Química Múltiple y Electrosensibilidad

CONFESQ presenta el primer “Libro Verde” en España que define medidas concretas para garantizar derechos laborales, accesibilidad y control ambiental en estos colectivos invisibilizados

La Coalición Nacional de Fibromialgia, Síndrome de Fatiga Crónica, Sensibilidad Química Múltiple y Electrohipersensibilidad (CONFESQ) ha presentado este 3 de diciembre el ‘Libro Verde: Adaptación del puesto de trabajo para personas con SQM y/o EHS’, un documento pionero en España que establece por primera vez criterios técnicos, sanitarios, jurídicos y organizativos para adaptar el entorno laboral a las necesidades de personas afectadas por Sensibilidad Química Múltiple (SQM) y/o Electrohipersensibilidad (EHS).

Se trata de una publicación inédita que busca abrir el camino hacia la inclusión real de más de 100.000 personas que, según estimaciones europeas, sufren estos síndromes en España, en un rango de prevalencia que puede llegar hasta el 12,5% de la población en Europa. CONFESQ, a través de sus asociaciones miembro, representa directamente a más de 15.000 personas y sus familias.

La guía cuenta con financiación de Fundación ONCE y la colaboración de COCEMFE, EQSDS y SFC-SQM Madrid.

Un libro para corregir décadas de falta de reconocimiento

Durante la presentación, la secretaria general de Fundación ONCE, Virginia Carcedo, subrayó que la SQM y la EHS “representan discapacidades emergentes y poco reconocidas”, y lamentó que “durante demasiado tiempo, las personas con estos diagnósticos han visto vulnerados sus derechos laborales”.

En el acto participaron también la representante del Ministerio de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030, Laura Sánchez Beltrán, y los múltiples autores del libro, que reúne aportaciones:

  • Científicas, como las de Pilar Muñoz-Calero (Fundación Alborada).

  • Jurídicas, de Paloma Torres, Isabel Díez (Medusa Human Rights) y Miguel Arenas (UOC).

  • Técnicas, de Inmaculada Sanz (arquitectura y mantenimiento), Juan Antonio Rivera (COMPROTECTA) y el Dr. José Molina Cabildo (medicina del trabajo).

  • Humanas, de María López Matallana y Rocío Aparicio, coordinadoras del libro.

La presidenta de CONFESQ, María López Matallana, destacó que esta guía “pretende facilitar a las empresas la adaptación de puestos de trabajo para superar barreras ambientales invisibles pero muy limitantes” y añadió que su uso es extensible a colegios, institutos, universidades, centros sanitarios, bibliotecas y otros entornos comunitarios.

Adaptaciones laborales: del entorno físico a la organización del trabajo

El ‘Libro Verde’ no solo es una herramienta técnica, sino también un instrumento para garantizar derechos, dignidad y accesibilidad.
Propone medidas que incluyen:

  • Cambios en la ventilación y la calidad del aire.

  • Eliminación de productos químicos irritantes.

  • Adecuación de mobiliario y materiales.

  • Reducción o control de campos electromagnéticos.

  • Flexibilización de horarios y tareas.

  • Uso de equipos específicos para minimizar exposición.

La guía incluye además casos reales de personas con SQM y EHS que han podido mantener su actividad laboral gracias a adaptaciones razonables, desmontando la idea de que integrar a este colectivo es “demasiado difícil”.

Invisibilidad, estigmatización y una discapacidad orgánica ignorada

El documento subraya que uno de los mayores problemas de estas personas es la invisibilización. La falta de conocimiento sanitario y social genera estigmas y frena su acceso al empleo.

Las personas con SQM y EHS pierden funcionalidad al exponerse a agentes ambientales comunes: perfumes, disolventes, pinturas, pesticidas, radiación electromagnética, dispositivos electrónicos, etc.
El único tratamiento eficaz es un control ambiental estricto, lo que obliga a modificar rutinas, espacios, materiales, alimentos o productos cotidianos.

Sin adaptaciones adecuadas, estas personas encuentran barreras que les impiden trabajar, acceder a centros sanitarios, estudiar, participar en la vida social e incluso entrar en espacios públicos básicos. Esta situación vulnera derechos fundamentales como el empleo, la educación, la salud y la vivienda.

Un punto de partida hacia un cambio estructural

CONFESQ insiste en que el ‘Libro Verde’ es solo el comienzo. La organización reclama que su contenido llegue a:

  • Administraciones públicas

  • Empresas y departamentos de RR. HH.

  • Expertos en prevención de riesgos

  • Sindicatos

  • Centros sanitarios y educativos

El objetivo es impulsar políticas de accesibilidad y ajustes razonables para afrontar estas discapacidades emergentes y evitar que miles de personas sigan excluidas por barreras ambientales evitables.

El ‘Libro Verde’ estará disponible en diciembre en la web de CONFESQ y se convertirá en un documento de referencia para profesionales, instituciones y entornos laborales que buscan avanzar hacia una inclusión real.

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