CSIF denuncia que el teletrabajo todavía no se está aplicando para el  personal laboral y funcionario dependiente del Principado de Asturias, pese  a haberse firmado el acuerdo a mediados de mayo de este año.  

El compromiso de la Administración en el momento de la firma del acuerdo,  fue que saldría en BOPA a mediados de junio y seguimos esperando.  

Recibimos muchísimas llamadas diariamente preguntando por qué no se  puede solicitar el teletrabajo y la Administración es totalmente opaca al  respecto.  

Primero el acuerdo necesitaba de un informe de intervención que  supuestamente daba problemas y ahora dicen que es alguna cuestión  relacionada con las Secretarías Generales Técnicas de las respectivas  consejerías. No nos dicen nada de forma explícita.  

El Principado pretendía comprar cientos de ordenadores portátiles para  llevar a cabo el teletrabajo, medida que creímos inviable desde CSIF por el  gasto inmenso que suponía para las arcas del Principado. Recordamos que  fue una medida que se pretendió llevar a cabo hace años en los colegios con  el alumnado y fracasó.  

CSIF planteó la tarifa plana, un complemento que se abona mensualmente  al trabajador a tanto alzado por el uso de equipamiento técnico propio. Así  evitaríamos la compra masiva de ordenadores, la obsolescencia de los  equipos y el coste desmesurado para la administración.  

CSIF planteó esto teniendo en cuenta el cumplimiento de la legislación  vigente. La fórmula de la administración de comprar ordenadores para  todos y no tener en cuenta el resto de equipamiento y gastos que ocasiona  el teletrabajo, traerá problemas.  

CSIF pide a la Administración que agilice su aprobación: los trabajadores  necesitan saber sus condiciones laborales a futuro para poder organizar sus  vidas.  

Barbón prometió el teletrabajo antes del verano y aún no tenemos nada.

CSIF cedió y renunció a su complemento mensual para no bloquear las  negociaciones y retrasar más su aprobación, a cambio de concesiones como  el plan a futuro de analizar todos los puestos en un plazo de 18 meses,  cedió en su posición para llegar a un primer acuerdo que permitiera echar a  rodar el teletrabajo, pero aún así Barbón sigue sin permitir teletrabajar a  sus 12.000 empleados públicos. 

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