Cuando un amigo se va

En la iglesia del Corazón de María no cabía nadie más, llena como estaba para dar del último adiós al doctor Eduardo González “Macano” fallecido el sábado a los 62 años tras una dura y rápida enfermedad. No exagero si comento que estuvieron representados todos los estamentos sociales comenzando por el delegado del Gobierno Gabino de Lorenzo y por el vice alcalde Jaime Reinares. Allí vi al empresario Amalio García, cónsul de la República Checa en Asturias, que a sus 89 años no para de crear riqueza y empleo a través de un montón de empresas relacionadas con la minería y las obras subterráneas. Aprovecho para saludar al doctor mierense Enrique Portilla, un excelente traumatólogo con más de 80 años a las espaldas y que aún conserva el humor suficiente para intercambiarnos a diario correos electrónicos sobre mil  una materias. Me hace gracia la anécdota que protagonizó esta mañana en el funeral y es que saludó efusivamente a Arturo González González de Mesa diciéndole “Amigo, tienes que rendirme pleitesía que soy tu presidente”. Ya se pueden imaginar la cara de asombro del hasta ahora concejal y portavoz del grupo municipal de Foro Asturias en el ayuntamiento de Oviedo. Según me confesó el propio doctor Portilla le confundió con el alcalde Agustín Iglesias Caunedo -tienen un aire, sí- que vive en el mismo edificio que Portilla en estos momentos presidente de la comunidad de vecinos. Supongo que el doblemente González ya se ha recuperado del susto tras saludar al ex jefe de protocolo municipal Enrique Fernández y seguramente también al que fue su asesor inicial en comunicación el periodista gijonés Manuel Cimadevilla.

El sacerdote en sus palabras tuvo el detalle de aludir al artículo que sobre Macano publiqué el domingo en La Nueva España. Cuando un amigo se va siempre te salen las frases del corazón. Los componentes de la peña “El Urogallo” a la que pertenecía desde hace años Macano estaban en bloque despidiendo al amigo. Observé con detalle la ceremonia religiosa por si la moda del Ipad se extendía a los oficiantes -cinco sacerdotes.- pero no, que sepa hasta el momento tan moderno artilugio solo lo ha utilizado el sábado en Covadonga el arzobispo de Oviedo Jesús Sanz. Los hermanos Cosmen, Alberto Lago, Manolo García Linares, Javier Batalla, José Velasco, a quien encontré muy recuperado, José Luis Poyal, José Gómez de “El Tizón”, y tantos otros amigos de Macano allí estuvieron esta mañana para darle el último adiós y arropar a su esposa María José, a sus dos hijos, y al resto de la familia. Saludé también a Marcos Vallaure, ex consejero de Cultura en el gobierno de Francisco Alvarez-Cascos, gran amigo de Macano.

Para rematar la jornada el senador Isidro Fernández Rozada me da otra mala noticia -vaya racha que llevo- y es que acaba de fallecer la que fuera su secretaria durante años del Partido Popular Carmen Requejo Freijo que solo tenía 58 años. Toda una institución en el Partido Popular asturiano y desde siempre vinculada al grupo parlamentario. Trabajadora infatigable y buena persona, el tsunami de la enfermedad la llevó por delante. Descanse en paz y mi más sincero pésame a su hija Elena. Una pérdida muy importante para el PP de Asturias, sin duda alguna.



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