Una misión de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) realiza una visita de trabajo a la Reserva de la Biosfera Banco Chinchorro, en Quintana Roo, para evaluar su posible incorporación al listado de Patrimonio Mundial, en la modalidad Mixta, considerando los componentes natural y cultural; esto la convertiría en el primer sitio del país en obtener tal distinción.

Así lo informó la Directora General de Desarrollo Institucional y Promoción de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp), Mariana Bellot Rojas, quien acompaña a la misión de expertos internacionales en su visita a esa Área Natural Protegida.

“Es una iniciativa impulsada de forma conjunta por la Semarnat, a través de la Conanp, y el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), dado que la región cuenta con una gran riqueza natural en buen estado de conservación y una importante barrera arrecifal, pero también destaca su relevancia cultural por los barcos hundidos que encallaron en Banco Chinchorro entre los siglos XVI y XX”, informó.

Recordó que a la fecha cuatro sitios de México están reconocidos como Patrimonio Mundial Natural: las reservas de la Biosfera Sian Ka’an, El Vizcaíno y Mariposa Monarca, así como las Islas del Golfo de California. Además, en la modalidad cultural se cuenta con 27 sitios inscritos. En caso de que la UNESCO anuncie la incorporación de Banco Chinchorro al listado en la modalidad Mixta (Natural y Cultural), sería el primer sitio del país en lograrlo.

La misión que envía el Comité de Patrimonio Mundial de la UNESCO la integran dos expertos de la Unión Mundial para la Conservación de la Naturaleza (UICN) y uno del Consejo Internacional de Monumentos y Sitios. Los primeros evaluarán la parte natural y el segundo hará énfasis en la cultural.

“Si se logra la incorporación de Banco Chinchorro en el listado en la modalidad Mixta, se incrementará aún más la importancia de esta región de la Península de Yucatán, donde la Conanp ha desarrollado durante muchos años un trabajo de conservación muy relevante. Este reconocimiento internacional obligaría no solamente a la Conanp, sino a los tres niveles de gobierno, a prestar mucha más atención a la zona para garantizar su conservación para disfrute y conocimiento de las próximas generaciones”, aseguró Bellot Rojas.

Explicó también que en Banco Chinchorro existen grupos sociales con gran actividad en el manejo del área, como las cooperativas de pescadores de langosta y caracol rosado, las cuales han trabajado de forma coordinada con el personal de la reserva para garantizar el aprovechamiento sustentable de ambos recursos, y han apoyado tanto al INAH como a la Conanp en este proceso. “Son ellos a los que más interesa que este sitio sea reconocido por su importancia cultural y natural, e incluso el presidente del Consejo Asesor de la Reserva es miembro de la comunidad pesquera de Banco Chinchorro”, afirmó.

La iniciativa para que esta Área Natural Protegida sea considerada Patrimonio Mundial surgió de la Conanp, a partir del trabajo que la Dirección de la misma realiza con grupos de pescadores. Posteriormente, el INAH se incorporó al proceso y sumó el trabajo que ha desarrollado con los barcos hundidos en la zona.

Además de Banco Chinchorro, en otros lugares están en marcha procesos de evaluación para su posible incorporación al listado de Patrimonio Mundial de la UNESCO, entre ellos: la Reserva de la Biosfera El Pinacate, en Sonora; la Reserva de la Biosfera El Ocote, en Chiapas (que junto con un sitio conocido como Arco del Tiempo será sometido para la categoría mixta), y Calakmul, en Campeche (que a la fecha está catalogada en la modalidad Cultural y que se pretende sea reconocido también su valor natural).

“Estamos en un momento muy importante; cada vez más en el mundo se reconoce la relevancia del patrimonio natural y para México es un reconocimiento enorme no sólo del esfuerzo que hace el Gobierno Federal, sino también diferentes organizaciones de la sociedad civil y académicos por la conservación de nuestro patrimonio natural”, concluyó Mariana Bellot Rojas.

FOTOS: Semarnat