Las previsiones superan el 90 % de ocupación en julio y agosto. Asturias se consolida como refugio climático, mientras el “efecto Trump” desvía turistas europeos hacia el norte de España.

Nunca hubo un verano tan deseado —ni tan reservado— en Asturias. Si las previsiones se cumplen, el verano de 2025 pulverizará todos los récords turísticos de la región, con cifras que apuntan a una ocupación hotelera superior al 90 % en julio y agosto, tanto en costa como en interior. Un fenómeno que no se debe solo al buen clima, sino a una combinación explosiva de factores: la inflación, el miedo al calor extremo del sur, y la política internacional.

“Estamos ante un verano histórico. Las reservas no paran. Esto no se veía ni antes de la pandemia”, señala OTEA, la patronal del turismo asturiano.

Cifras que hablan solas: Asturias arrasa en reservas

• Más de 2,8 millones de viajeros visitaron Asturias en 2024, según el Principado, un millón más que antes de la pandemia.

• 6,72 millones de pernoctaciones, récord absoluto en la serie histórica.

• Para este 2025, los datos son aún mejores: las reservas de julio ya superan en un 8 % las del mismo mes del año pasado.

• En Gijón, se espera lleno técnico en la primera quincena de agosto.

En lugares como Villaviciosa, la ocupación ya ronda el 90 % para agosto, con picos del 95 % en junio. El hotel Casa España o el Palacio de Avilés confirman una altísima demanda anticipada, algo poco habitual en mercados que solían vivir de la “última hora”.

“Las reservas empezaron ya en noviembre. Agosto está casi lleno. Julio va más despacio, pero también fuerte”, explica Isaac Fernández, gerente de alojamientos rurales en Pravia y Soto del Barco.

Asturias, refugio climático frente al infierno del sur

Con temperaturas que ya han superado los 42 ºC en zonas del sur peninsular, Asturias se ha convertido en el nuevo destino de moda para quienes buscan frescor, verde y mar. Desde hace tres veranos, la región capitaliza el cambio climático, atrayendo a turistas nacionales e internacionales hartos del calor insoportable en Levante, Andalucía o el sur de Francia.

“Asturias está de moda. El tiempo acompaña, las conexiones mejoran y la calidad de vida aquí no la hay en ningún otro sitio”, resume Pedro Caramés, portavoz de hostelería en Oviedo.

Nuevas rutas, más vuelos y turistas extranjeros

El Aeropuerto de Asturias ha incrementado su tráfico en un 4,4 % solo en la primera mitad del año, y aerolíneas como Volotea han aumentado su oferta en más de 827.000 asientos para 2025, con rutas directas a destinos europeos clave.

Gracias a esa conectividad aérea, los turistas franceses y británicos volverán a ser este verano los principales emisores internacionales hacia Asturias, según la Federación de Agencias de Viaje.

???????? Trump, Gaza y el turismo redirigido

Uno de los factores más sorprendentes de este boom turístico es el llamado "efecto Trump": la impopularidad del presidente estadounidense, unida a los conflictos en Oriente Medio, ha hecho caer las reservas hacia EE. UU. e Israel entre un 5 % y un 15 %, según la patronal nacional. ¿El resultado? España y el norte peninsular, entre ellos Asturias, salen beneficiados como destinos seguros, hospitalarios y con oferta cultural.

Turismo rural y boca a boca: el otro motor

El turismo rural también vive su momento. En julio y agosto, la previsión es superar el 62 % de ocupación en casas y alojamientos rurales asturianos, por encima de la media nacional. El gasto estimado por persona ronda los 91 € diarios, y crece el fenómeno del "boca a boca viajero": turistas que repiten y recomiendan Asturias como destino alternativo y natural.

“Nos llega gente que ha oído hablar maravillas de la zona. Vienen a una casa y, a los pocos días, nos llaman sus amigos para buscar otra cerca”, comenta Antonio Busto, del hotel AB Murias Blancas.

¿Y cuánto gasta el visitante?

Según Dataestur y SEGITTUR:

• El turista nacional gasta de media 323 € por estancia.

• El visitante internacional supera los 1.440 € por viaje.

• En total, el turismo dejó en Asturias 1.247 millones de euros en 2024, y se espera que en 2025 esa cifra sea aún mayor

• Asturias no solo está de moda, se ha profesionalizado

La clave ya no es solo “Asturias, paraíso natural”. Ahora lo es también por conectividad, capacidad hotelera, atractivo climático y estabilidad. Un destino de confianza para el visitante español y europeo.

Récords, refugio climático, reservas anticipadas, nuevos vuelos y la política internacional juegan a favor de Asturias. Este verano promete ser el más exitoso de nuestra historia turística.