(De realoviedo).-Veljko Paunovic, entrenador del Real Oviedo, compareció visiblemente molesto en la rueda de prensa posterior a la derrota por 1-0 ante el CD Mirandés en Anduva, en la ida de la final del playoff de ascenso a Primera División. El técnico serbio lamentó profundamente la falta de acierto de su equipo de cara a portería, aunque se mostró satisfecho con la actitud y la propuesta de los suyos. "Tengo un cabreo tremendo por fallar las oportunidades que hemos tenido. Haber marcado el gol hubiera sido crucial", reconoció con contundencia. "El equipo ha jugado bien y nuestra propuesta era ir a por el partido. Lamentablemente se adelantaron muy rápido y se torció la dinámica que estábamos buscando". El gol de Gabri Martínez, que llegó en el minuto 3, alteró los planes iniciales del conjunto carbayón, aunque Paunovic subrayó que sus jugadores supieron mantener la compostura: "No nos descompusimos. Es un rival muy difícil en cuanto a su manera de jugar, muy desafiante, y estuvimos bien manejando las segundas jugadas y los duelos". A pesar de la mejora oviedista en la segunda mitad, el tanto del empate nunca llegó.

El técnico explicó que los cambios estaban orientados a buscar centros al área, pero lamentó ciertas imprecisiones: "Nos faltó gol. En la segunda parte la convicción era mayor, pero no materializamos. Los cambios estaban hechos para meter centros y no para cometer faltas dentro del área, que además regalamos. Era el combate que esperábamos, lo único con lo que no estamos contentos es con el resultado. Si hay que perder de alguna manera, que sea así". Sobre su decisión táctica de salir con tres centrales, Paunovic explicó que buscaba dificultar la salida de balón del Mirandés: "Queríamos crearles problemas en su salida y creo que lo conseguimos. Ellos jugaban mucho en largo y nosotros, con balón, tuvimos una propuesta buena, aunque faltó llegada. Con viento a favor en la primera parte pedimos tirar más, y solo hicimos un disparo".

En cuanto al análisis del gol rival, confesó no haberlo visto en televisión, pero sí revisado por parte del cuerpo técnico: "Había una situación previa en la que podíamos haber contenido. Ganaron una disputa y la finalización de cabeza fue buena. Fue quizá la única acción en la que no estuvimos bien y nos costó el gol". De cara al partido de vuelta, Paunovic pidió confianza en el equipo: "El mensaje al encajar fue que esto sigue siendo 0-0. Lo que no quería era que se descompusiera el plan. En la segunda parte fuimos más a por ellos, nos faltó el gol. Lo del penalti es una pena, pero son cosas que pasan. Que nadie dude de que vamos a estar listos para el sábado". El Real Oviedo buscará remontar el próximo sábado en el Carlos Tartiere, donde una victoria por dos goles le daría el ansiado ascenso a Primera División. Paunovic, a pesar del resultado adverso, mantiene intacta la confianza en los suyos.

Creer siempre hasta el final

Todo se decidirá en el Carlos Tartiere. El CD Mirandés derrota por 1-0 al Real Oviedo en la ida de la final del playoff en un partido en el que los locales de adelantaron en el marcador nada más arrancar el partido. Colombatto, en el 85', falló un penalti en lo que pudo ser la igualada y la victoria por la mínima de los de Lisci se consumó.

La entrada de Oier Luengo en el once y el cambio de sistema fue lo más significativo para este choque. Paunovic también apostó por Paraschiv en la punta de ataque. Sin embargo, partido no comenzó bien para los azules que en el minuto 4 se encontraron con el primer revés. Reina transformó de cabeza un centro desde la izquierda y el Oviedo tenía que remar. En el primer periodo, Chaira tuvo la más clara para los nuestros pero su remate, de cabeza, se marchó rozando el palo. 

Tras el paso por vestuarios, Viñas y Cardero entraron al campo con el paso de los minutos y el Oviedo tendría el empate. Antes, Aarón Escandell salvó al equipo con un paradón con mayúsculas tras un latigazo de Izeta desde la frontal. Ya en el 85', el colegiado revisó un penalti claro sobre Hassan para otorgar pena máxima para el Real Oviedo. Colombatto asumió la responsabilidad pero Raúl Fernández se convirtió en el héroe y detuvo el lanzamiento. 

Ahora, el Carlos Tartiere deberá ser una caldera y ser clave en el choque de vuelta donde el Real Oviedo tratará de revertir el resultado adverso y certificar su ascenso a Primera División. Creer, confiar y luchar hasta el final.