Baranoa, Atlántico. Adriana Muñoz (SIG). En una tarde calurosa del Caribe colombiano, sentado apaciblemente en una silla de la sala de su casa y con un ventilador zumbando a lado y lado, José Miguel Cervantes evoca las épocas en las que sirvió al país, durante la Guerra de Corea.
Partió hacia la guerra el 11 de julio de 1953, con la expectativa de poder hacer un buen papel con el Batallón de Infantería Número 1 Colombia, y con el fuerte deseo de volver a ver su tierra.
Su travesía duró casi un mes por el Océano Pacífico. Él recuerda que fueron 4.338 colombianos los que partieron como voluntarios a Corea y, con dolor, indica que regresaron 4.038.
Cumplió 80 años el pasado primero de enero. A su edad tiene su memoria intacta, y con orgullo evoca que regresó vivo de aquella dura batalla que para él duró cerca de siete meses.
José Miguel es un baranoero que todavía disfruta de las fiestas del Carnaval de Barranquilla. Su camisa de colores y su ritmo al hablar dan cuenta de la alegría de los habitantes de esta zona del país, de fiesta por estos días, mientras recuerda lo mucho que bailaba cuando era joven y su participación anual en las comparsas de incontables Carnavales.
Con sus manos curtidas, abre un álbum donde guarda fotos que invaden sus recuerdos. Orgulloso muestra la fotografía con la medalla de reconocimiento que le otorgó el Gobierno de Corea del Sur y, con el mismo entusiasmo, señala un recuerdo que hoy es uno de sus tesoros: una foto en la que él aparece con el actual Presidente de la República cuando éste era Ministro de Defensa.
A Baranoa, municipio del Atlántico que tiene 56.037 habitantes, asiste este viernes el Presidente Juan Manuel Santos, a poner la primera piedra del proyecto Urbanización San Jose Etapa II, del programa de las 100 mil viviendas gratis del Gobierno Nacional, y allí estará presente José Miguel, quien sostiene que erradicar la pobreza es la mejor manera de contribuir a la construcción de la paz.
