CEOE y CEPYME califican de "pésimos" los resultados de la Encuesta de Población Activa del cuarto trimestre de 2011, ya que "demuestran que el mercado laboral español, lejos de mejorar, continúa destruyendo empleo de forma intensa, lo que lleva los niveles de paro a máximos históricos".

En opinión de ambas Confederaciones, el reciente acuerdo firmado por los agentes sociales, que incluye una moderación salarial para este año y los dos próximos ejercicios, "pretende contribuir a que el mercado laboral español logre salir de esta continua espiral de deterioro. Igualmente importante son los acuerdos de mejora para la flexibilidad interna de las empresas alcanzados en materia de negociación colectiva".

No obstante entienden que, "para conseguir que la economía española logre sentar las bases para volver a crear empleo, es urgente una reforma estructural de nuestro mercado laboral".

En su análisis recuerdan que 2011 finaliza con el peor de los escenarios posibles en el mercado laboral. En concreto, el cuarto trimestre se salda con una fuerte destrucción de empleo, que empuja la cifra de desempleo a los niveles más elevados en la serie histórica, casi 5,3 millones de personas. Como consecuencia, la tasa de paro ha sufrido un considerable repunte, hasta el 22,85%, la más elevada desde 1995.

En el cuarto trimestre del año pasado, la ocupación descendió en 348.700 personas, lo que supone un registro peor que lo previsto, y la mayor caída en un cuarto trimestre desde 2008, cuando los ocupados cayeron en casi 490.000 personas. La fuerte destrucción de empleo trimestral se traduce en una notable intensificación de los ritmos de caída interanuales: una tasa del -3,26% y 600.600 ocupados menos que hace un año. De esta forma, el número total de ocupados se sitúa en 17.807.500 personas, lo que supone retroceder a los niveles de empleo existentes en el año 2004. En términos desestacionalizados, según los datos del Ministerio de Economía y Competitividad, la caída de la ocupación fue menor, 248.000 personas, ya que en este trimestre tradicionalmente el empleo suele descender. Aún así, la cifra desestacionalizada demuestra claramente el deterioro del mercado laboral español.

Por sectores, la ocupación ha caído en todos ellos, salvo en la agricultura. Especialmente destacable es la disminución del empleo en los servicios, con más de 300.000 ocupados menos en el cuarto trimestre.

La población activa descendió en el cuarto trimestre en 53.400 personas y la tasa interanual ha disminuido hasta el -0,1%. La caída de la población activa ha evitado un incremento mayor del paro, que aumentó en 295.300 personas, de forma que la cifra total de desempleados se sitúa en 5.273.600 personas. En consecuencia, la tasa de paro ha repuntado sensiblemente, hasta el 22,85%, tras el 21,52% registrado en el tercer trimestre.

El número de trabajadores por cuenta propia descendió en sólo 300 personas, mientras que los asalariados cayeron en 350.200 personas. Este trimestre se ha registrado una caída tanto de los asalariados con contrato indefinido como los que cuentan con contrato temporal, aunque el descenso ha sido más elevado en el caso de estos últimos. En consecuencia, la tasa de temporalidad se moderó hasta el 24,98%.

En el cuarto trimestre de 2011, el número de hogares con todos sus miembros activos en desempleo registró un aumento de 149.800, con lo que el total asciende a 1.575.000 hogares.