Langreo,. Desde que el Ayuntamiento de Langreo ofrece la posibilidad de realizar visitas guiadas al Ecomuseo Minero Valle de Samuño, un total de 419 personas se han interesado por conocer de primera mano el ambicioso proyecto.

A punto de concluirse las obras de tren turístico y rehabilitado el Pozu San Luis, elemento patrimonial más destacado del Ecomuseo, el interés que despierta el Valle de Samuño va en aumento: de 79 visitantes en mayo y junio, se ha pasado a 179 entre octubre y noviembre.

La alcaldesa de Langreo, Esther Díaz, comentó que con esta visitas se pretende dar a conocer “este gran proyecto y hemos comprobado que la gente cuando lo conoce se sorprende por su dimensión y en este tiempo podemos constatar que hemos tenido una gran acogida. Ahora esperamos contagiar esa misma ilusión y proyección a las administraciones del Principado y el Ministerio, a quienes hemos invitado a participar con nosotros en el Consorcio”.

Las visitas, adaptadas y personalizadas a las características e inquietudes de de cada grupo, suelen acompañarse de una presentación previa del proyecto, e incluyen un paseo por parte de la trinchera ferroviaria del tren turístico y un recorrido por las instalaciones del Pozu San Luis, para terminar en el poblado de La Nueva, donde sus vecinos “suelen aportar las vivencias personales y recuerdos de la actividad minera, especialmente la AAVV San Luis que desde hace muchos años trabaja por impulsar este proyecto, hablar con los visitantes intercambiando opiniones y contándoles vivencias, lo que forma también parte de la filosofía y la esencia del Ecomuseo”, tal y como destacó la concejal de Cultura, Ana Oliva Rodríguez.

Los perfiles del visitante son muy variados: grupos de estudiantes de turismo, periodistas especializados, pensionistas, visitas institucionales, o expertos en patrimonio industrial, turismo y empresarios del sector, como los asistentes a las XIII Jornadas Internacionales del Patrimonio Industrial, los I Encuentros sobre el Turismo en las Cuencas Mineras o los integrantes del Cluster Turístico de Asturias. Además, Ana Oliva Rodríguez recordó que “también hemos realizado algunas visitas con niños e, incluso, una concentración de SEAT 600. Pero el elemento común de todas las visitas es el grado de satisfacción, el asombro con el que observan las instalaciones y la intensidad con la que viven esta experiencia minera real”.  

Por otro lado, son muchas las personas que, a nivel particular, han realizado el recorrido hasta el Pozo San Luis por la senda verde. Precisamente, parte de este trazado será el que se podrá recorrer en el tren minero, una vez que se ponga en marcha.