El viernes 11 de julio falleció en Barcelona a los 78 años Toni Cruz, genio detrás de La Trinca y revolucionario de la televisión de entretenimiento. Su legado es inmenso.
Por generaciones, millones de españoles se han reunido frente al televisor para cantar, reír, emocionarse o descubrir nuevos talentos. Detrás de muchos de esos momentos inolvidables estaba él: Toni Cruz, un nombre que quizá el gran público no pronunciaba a diario, pero que marcó para siempre el pulso de nuestra televisión.
Este viernes, Toni Cruz –productor, guionista, creativo y uno de los pioneros más influyentes del audiovisual español– se marchó discretamente, con ese mismo estilo elegante con el que supo transformar la televisión en algo más que espectáculo.
De La Trinca a leyenda de la cultura pop
Nacido en Canet de Mar (Barcelona) en 1946, Toni Cruz encontró pronto su lugar en la creación cultural. En los años 60 fundó junto a Josep Maria Mainat y Miquel Àngel Pasqual el trío humorístico-musical La Trinca, que rompió todos los moldes.
La Trinca no era solo un grupo musical, sino un fenómeno que combinaba sátira política, humor corrosivo y talento escénico en catalán y castellano. Arrasaron en discos, teatros y televisión, y se convirtieron en emblema de una España que empezaba a reírse de sí misma tras el franquismo.
Pero Toni Cruz no se detuvo ahí. Supo mirar más allá del escenario.
Gestmusic: la revolución
En 1987, Cruz cofundó la productora Gestmusic, que se convertiría en sinónimo de innovación. Desde sus oficinas surgieron programas que marcaron época: Lluvia de estrellas, ¡Mira quién baila!, Crónicas marcianas, Tu cara me suena y, sobre todo, Operación Triunfo, uno de los fenómenos más descomunales de la televisión en España y América Latina.
Cruz tenía el raro talento de detectar formatos que no solo funcionaban, sino que conectaban emocionalmente con el espectador. Apostó por el talento joven, confió en el humor sin miedo, y entendió la televisión como un espacio de juego, emoción y descubrimiento.
Bajo su dirección, Gestmusic no solo triunfó en audiencias: exportó formatos a decenas de países, consolidando a España como potencia internacional del entretenimiento.
Reinventarse siempre
Tras vender su participación en Gestmusic, Toni Cruz fundó en 2019 la productora Reset TV, desde la que siguió desarrollando nuevos formatos. En 2022 aceptó un nuevo reto: el de transformar la estrategia audiovisual del Fútbol Club Barcelona, donde impulsó la plataforma Barça One, convencido de que el entretenimiento tenía también que adaptarse a los tiempos digitales.
No dejó de crear hasta el final. Esa curiosidad insaciable fue su mayor virtud.
Reconocido, querido, inolvidable
En 2019 recibió la Creu de Sant Jordi, una de las máximas distinciones de la Generalitat, por su contribución a la cultura catalana y su impacto mediático.
Amigos, colaboradores y miles de espectadores han llorado su pérdida. Pero todos coinciden en algo: su legado está vivo en cada plató, en cada escenario, en cada gala que emociona.
“Se ha ido de gira indefinida. Donde esté, ya estará liderando un equipo”, escribió su familia con el humor que siempre le definió.
Un pionero con alma de músico
Toni Cruz fue, antes que nada, un creador con vocación humanista. Le importaban las personas. Escuchaba, cuidaba, apostaba por talentos desconocidos. Tenía oído para la música, para las emociones, para la televisión de verdad.
Gracias, Toni.
Gracias por enseñarnos que un plató también puede ser un escenario. Que una canción puede cambiar una carrera. Que la televisión puede ser arte, espectáculo y emoción al mismo tiempo.
Gracias por mirar más allá del encuadre y regalarnos una forma nueva de mirar el mundo.
Descansa en paz. La cultura, la televisión y la alegría tienen hoy un hueco más grande que el prime time.