Nestlé invertirá otros siete millones en la planta de Gijón y refuerza su compromiso con una marca que lleva el sabor asturiano por todo el mundo

La fabada más famosa de España cumple 75 años. Y lo hace donde nació: en Gijón, en la planta de Nestlé, hogar de Fabada Litoral, un emblema de la gastronomía asturiana que ha llevado el nombre del Principado a cocinas y mesas de medio mundo.

El presidente del Principado, Adrián Barbón, encabezó este jueves el acto conmemorativo del 75 aniversario de Fabada Litoral, y lo hizo con un mensaje de orgullo y reivindicación:

“Asturias es, en sí misma, una gran marca de calidad”, proclamó entre aplausos, subrayando que Litoral es “mucho más que una empresa: es una embajadora gastronómica que ha hecho de la fabada un símbolo universal”.

Un icono que une tradición, innovación y orgullo

Barbón destacó el valor simbólico de esta conmemoración, asegurando que “pocos actos tienen tanto sabor como este”. Recordó que la fabada no es solo un plato, sino una declaración de identidad, y que Litoral ha sido, durante décadas, una de las grandes responsables de proyectar esa esencia fuera de Asturias.

“Decir fabada es decir Asturias”, afirmó el presidente, al tiempo que celebró el arraigo gijonés de la marca y su decisión de mantener intacto su vínculo con la región desde que Nestlé la adquirió en 1985.

El mandatario también elogió la capacidad de la empresa para combinar tradición y modernidad, con campañas publicitarias tan recordadas como la de las “güelas”, que se convirtieron en parte de la memoria colectiva de varias generaciones.

Nestlé refuerza su apuesta por Asturias con una nueva inversión

El acto, celebrado en la planta de Gijón, contó con la participación del director general de Nestlé España, Jordi Llach, y de la directora de la fábrica, Isabel Velasco, quienes anunciaron una nueva inversión destinada a modernizar las instalaciones, elevando a siete millones de euros el desembolso total realizado en los últimos cinco años.

Barbón celebró el anuncio como “una muestra tangible de confianza en el futuro industrial de Asturias” y en el potencial de su sector agroalimentario.

“Cada euro invertido aquí es una apuesta por el empleo, la innovación y la identidad de esta tierra”, afirmó.

Actualmente, la planta gijonesa da trabajo a más de un centenar de personas y mantiene una estrecha colaboración con la fábrica de Sebares (Piloña), referente europeo en nutrición infantil dentro del grupo Nestlé.

Una marca que recorre Europa... y el tiempo

Durante su intervención, el presidente recordó una curiosa cifra que refleja el alcance de la marca: la producción anual de Litoral equivale al trayecto entre Gijón y Praga, más de 2.100 kilómetros.

“Imaginemos esos botes alineados uno tras otro atravesando Europa: eso es Litoral, una historia de éxito que conecta Asturias con el mundo”, subrayó.

Pero más allá del volumen o del marketing, Barbón insistió en que el secreto de Litoral reside en la calidad real del producto. “Tres cuartos de siglo de crecimiento no responden a una campaña publicitaria, sino al hecho de ofrecer un producto que gusta y que mantiene su esencia”, dijo.

La industria agroalimentaria, motor del futuro asturiano

El presidente aprovechó el aniversario para lanzar un mensaje más amplio: el de la oportunidad que representa el sector agroalimentario para el desarrollo de Asturias, especialmente en el medio rural.

“Tenemos un campo fértil de futuro si seguimos apostando por la autenticidad y el origen. Fabada Litoral demuestra que es posible combinar raíces e innovación, tradición y progreso”, señaló.

El dirigente asturiano citó ejemplos del potencial regional en platos preparados, carnes, quesos, yogures y productos lácteos, todos ellos con “el sello de calidad de Asturias”.

Un aniversario con sabor a orgullo asturiano

El acto finalizó con un mensaje de gratitud del presidente a la plantilla de Nestlé en Gijón, “por mantener viva una historia que comenzó hace tres cuartos de siglo y que hoy es patrimonio sentimental de Asturias”.

“El 75 aniversario de Fabada Litoral es un motivo de orgullo para la empresa, para su gente, para Gijón y para todo el Principado”, concluyó Barbón, entre sonrisas, recordando la célebre frase de sus anuncios:
“¡Abuela, esto está de muerte!”.