El presidente Barbón lamenta la pérdida del exmandatario autonómico y destaca su papel clave en la reconversión industrial, su amor por Asturias y su legado político al frente de Llanes, el Principado y el Congreso
Asturias llora la pérdida de uno de sus grandes referentes políticos. Antonio Trevín, expresidente del Principado, falleció anteayer en Llanes a los 69 años, dejando tras de sí una trayectoria ejemplar de servicio público que marcó el rumbo del asturianismo moderno y del municipalismo comprometido con la ciudadanía.
El presidente del Gobierno asturiano, Adrián Barbón, ha querido rendirle homenaje en la capilla ardiente instalada en la sede de la Presidencia del Principado, en Oviedo/Uviéu, donde ha acompañado a la familia del político llanisco. “Hoy es un día duro para quienes de una forma u otra lo conocimos, lo valoramos y lo escuchamos”, ha afirmado emocionado.
El presidente que encauzó Asturias en plena tormenta
Barbón ha subrayado que Trevín tuvo un papel determinante en uno de los momentos más complejos de la historia reciente de Asturias: “En un momento de gran inestabilidad, él supo encauzar los proyectos vinculados a la reconversión de nuestra tierra”, ha declarado. Su liderazgo político durante los años 90 fue esencial para dar dirección y esperanza a una región inmersa en profundos cambios estructurales.
“Era un presidente profundamente orgulloso de la identidad asturiana, de su tradición, de su historia, de su cultura, de sus lenguas... En eso aprendí mucho de él”, ha reconocido Barbón, destacando también su carácter cercano, su vocación docente y su pasión por la política como instrumento de transformación.
El primer presidente que nació en la política local
Antonio Trevín fue el primer presidente autonómico que había sido antes alcalde, algo que marcó profundamente su estilo de gobernar. Su vocación municipalista se forjó en Llanes, localidad a la que puso en el mapa con una gestión reconocida y transformadora.
Alcalde en dos periodos (1987-1993 y 1999-2004), Trevín también fue presidente del Principado (1993-1995), delegado del Gobierno en Asturias (2004-2011), diputado autonómico y nacional, concejal, y director provincial de Educación en sus inicios. Una carrera política extensa y polifacética siempre ligada al interés general y al amor por Asturias.
Una medalla que no llegará a entregarse
El pasado 7 de abril, el Ejecutivo autonómico acordó concederle la Medalla de Asturias 2025 por su extensa trayectoria pública, tanto en el ámbito educativo como político. El acto estaba previsto para el próximo 8 de septiembre, Día de Asturias, y Barbón ha lamentado no haber podido entregársela en vida: “Le habría encantado recibirla, y a mí me habría emocionado colocársela como símbolo de gratitud colectiva”.
Asturias decreta tres días de luto oficial
Como muestra de respeto, el Gobierno del Principado ha decretado tres días de luto oficial, durante los cuales las banderas de los edificios públicos ondearán a media asta y se suspenden los actos extraordinarios del Ejecutivo autonómico, aunque continuará la actividad ordinaria.
Con su fallecimiento, Asturias pierde una figura clave en la construcción de su autonomía moderna. Pero su legado perdura en las instituciones que ayudó a fortalecer, en los derechos que defendió y en las vidas que tocó con su compromiso, desde las aulas hasta el Congreso.
Antonio Trevín fue, por encima de todo, un hombre al servicio de Asturias. Y hoy, su tierra lo despide con gratitud, respeto y un inmenso pesar.