Uruguay instalará un hogar que ampare a menores víctimas de explotación sexual

Uruguay instalará un hogar que ampare a menores víctimas de explotación sexual
La mayoría de los casos de prostitución de niños, niñas y adolescentes se registran en las ciudades fronterizas. Para cortar el circuito de explotación y proteger a las víctimas, INAU gestiona la instalación de un hogar especializado en Montevideo. El director del instituto, Jorge Ferrando, aseguró que una de las claves del éxito de la denuncia sería que quienes paguen por los servicios de estos menores vayan a prisión.

El Instituto del Niño y el Adolescente del Uruguay (INAU) coordina un equipo interinstitucional que trabaja contra las situaciones de explotación sexual. El director Jorge Ferrando aseguró que cuanto más se hable del tema, las personas más se animan a denunciar. También precisó que en lo que va de 2011 se recibieron cerca de 30 denuncias de explotación, mientras que en años anteriores no pasaban de 15. 

 

Los casos más conocidos ocurren en las ciudades de frontera con Brasil y Argentina como en localidades de paso de camioneros (Paso de los Toros y Young). "En Nueva Palmira se dieron varias denuncias. Allí actúa el Poder Judicial y en varios casos interviene el crimen organizado", explicó Ferrando. 

 

Agregó que, si bien fueron a prisión algunos adultos que prostituían a los menores, lo más difícil es que las personas que pagan por servicios sexuales de niños y adolescentes sean encarcelados. "Eso normalmente no ocurre e incluso se ve con cierta naturalidad que un hombre pague por servicios sexuales con una adolescente o un varón", concluyó. 


El jerarca informó que INAU trabaja con el Ministerio de Turismo en el tema y procuran comprometer a las cámaras empresariales y a los camioneros en una campaña de prevención. 


Las autoridades aspiran que en 2012 esté funcionando un hogar especializado en Montevideo, para dar protección a las adolescentes víctimas de explotación sexual, ya que en muchos casos si no salen de la ciudad donde viven es difícil cortar el circuito de explotación.

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