Según el dicho, la prostitución es el oficio más antiguo del mundo, y puede que sea así, ya que algunos investigadores han encontrado vestigios en yacimientos prehistóricos de esta práctica. El término “prostitución” vine del latin “prostituere” “exhibir a la venta”.

En La Edad Media se colgaba a la puerta de las mancebías un ramo, por esa razón empezaron a llamar a las trabajadoras “rameras”. Se las obligaba a llevar trajes especiales y se las separaba de las mujeres decentes incluso en las tumbas existiendo un lugar especial para ellas en las iglesias. Según las disposiciones reales de los Reyes Católicos las barraganas debían llevar picos pardos en la saya para diferenciarlas de las castas. De ahí el dicho de “andar a picos pardos”.

En el siglo XVI para que una joven  pudiese ejercer tenía que acreditar con documentos ante el juez de su barrio, ser mayor de 12 años , no ser virgen, ser huérfana o abandonada por su familia, siempre que esta no fuese noble, Este le otorgaba un documento para autorizarla a trabajar.

En las disposiciones del Ayto, de Oviedo de 1576 reza:

Las mozas decentes deben guardarse de usar albanega y rebozo por llamar  este atuendo a engaño, debiendo vestir toca  o rebozo, so pena de 1000 reales y destierro de cuatro años.

La albanega era una redecilla que dejaba verse el cabello, al contrario que la toca que lo cubría en su totalidad

Las mancebías tenían  sus propias leyes y ordenanzas, que dependían de comisiones de munícipes para tener los negocios abiertos, portando en muchas ocasiones dineros a las arcas municipales.

A finales del siglo XIX , y principios del XX los mayores enemigos de los prostíbulos eran los anarquistas  antrospor ser lugares donde los señoritos de divertían. Al  contrario que los partidos conservadores disculpaban estos negocios porque los obreros podían allí desfogar sus instintos evitando mayores males en el puesto de trabajo.

En Asturias, al igual que el resto de las provincias, existieron muchos prostíbulos de mayor o menor fama y categoría.

En Oviedo convivieron “La Guillermina” y “El Cairo” en el Postigo, “el Condal” en Campo Los Patos” con El Café Cantante que estaba situado en La Plaza El Riego donde hoy hay una pizzería.

En Gijón los lupanares se situaban en Cimadevilla, por ser este el barrio más antiguo y transito de marineros y viajeros del puerto. Alguno a destacar por sus nombres “La gaviota Calva” y “El farolillo Rojo”

En la Felguera fue famoso el “teatro Felguerino”, donde además de realizarse representaciones teatrales antes de la guerra, fue un afamado cabaret al que asistían los señoritos de la comarca.

En Avilés fue famoso “Las cuatro naciones”, en frente de la zona “La Parra” .

 En  Mieres  “Casa Berta”, “La estación” donde el peadero , y más moderno “la dama de Lago”.

Todos ellos lugares emblemáticos donde no solo se dedicaba al sexo, sino al esparcimiento e incluso al amor