Fue el hombre que susurró a los mercados para salvar la moneda única. Pero también fue el primer ministro que unió a Italia en mitad de una tormenta. Y ahora, el economista y político italiano Mario Draghi ha sido reconocido con el Premio Princesa de Asturias de Cooperación Internacional 2025, por su “firme compromiso con los valores fundamentales de la Unión Europea” y su papel clave en la defensa de una Europa unida, resiliente y competitiva.
UN LÍDER DE LARGO ALCANCE
Según el acta del jurado, Draghi es “símbolo de una Europa unida, libre, fuerte y solidaria”, gracias a su visión de largo plazo y su defensa decidida del multilateralismo, la cooperación entre Estados y la competitividad basada en tres grandes transformaciones: innovación, descarbonización y seguridad económica.
Nacido en Roma en 1947, Mario Draghi ha transitado por las más altas esferas del poder económico y político: fue gobernador del Banco de Italia, presidente del Banco Central Europeo (BCE) y primer ministro de Italia. En todos esos cargos, ha ejercido como una figura clave para la estabilidad financiera europea, la respuesta a las crisis y la defensa de los valores comunes.
“HAREMOS LO QUE HAGA FALTA”: LA FRASE QUE SALVÓ AL EURO
Su mandato en el BCE (2011–2019) quedará para siempre vinculado a una sola frase: “Haremos lo que haga falta para salvar el euro. Y créanme: será suficiente.”
Con esas palabras pronunciadas en julio de 2012, Draghi no solo contuvo una crisis financiera europea desbocada, sino que restauró la confianza de los mercados e impulsó la cohesión del proyecto comunitario.
El “Plan Draghi”, lanzado en 2015, fue su respuesta técnica a la crisis: un ambicioso programa de compra de activos públicos y privados que logró contener la inflación y estimular el crecimiento económico en la eurozona. Su visión como economista fue discutida, pero su impacto político fue innegable.
UN PRIMER MINISTRO PARA TIEMPOS DE EMERGENCIA
En febrero de 2021, tras una nueva crisis política en Italia, el presidente Sergio Mattarella le pidió que encabezara un gobierno de unidad nacional. Draghi aceptó el reto y lideró un ejecutivo técnico que logró reformas estructurales clave y gestionó los fondos del programa de recuperación europeo Next Generation EU.
Durante su breve pero influyente mandato (2021–2022), Draghi fue defensor del multilateralismo, la transición verde, la cooperación en salud y la digitalización. Consolidó relaciones estratégicas con líderes europeos y transatlánticos, y su figura sirvió como garante de estabilidad en el corazón de Europa.
DE LOS MERCADOS A LA ESTRATEGIA PARA EUROPA
En 2023, Ursula von der Leyen le encargó un ambicioso informe sobre la competitividad europea, presentado en 2024, en el que abogó por reforzar los lazos de la Unión y construir una economía basada en la transformación verde, la innovación tecnológica y la autonomía estratégica.
UN PREMIO CON SELLO INTERNACIONAL
El Premio Princesa de Asturias de Cooperación Internacional, que Draghi recibe este año, reconoce cada edición la contribución de personas e instituciones al progreso común. En sus ediciones anteriores han sido galardonados nombres como la Organización de Estados Iberoamericanos (2024), Wikipedia (2015), la Fundación Bill y Melinda Gates (2006) o incluso personalidades como Nelson Mandela y Mijaíl Gorbachov.
Este 2025, entre 31 candidaturas de 13 países, el jurado ha querido distinguir a Draghi por ser una figura de equilibrio, solvencia e impulso institucional en una Europa zarandeada por guerras, crisis sanitarias y desafíos económicos.
UNA CEREMONIA CON SELLO ASTURIANO
El premio, dotado con 50.000 euros, una escultura de Joan Miró y una insignia oficial, será entregado en octubre en el Teatro Campoamor de Oviedo, en presencia de Sus Majestades los Reyes de España y de la Princesa de Asturias, en el marco de la 45.ª edición de los galardones.
Con este premio, Mario Draghi no solo ve reconocida su trayectoria como gestor técnico de primer nivel, sino también su condición de estadista europeo, de referente global y de constructor de puentes entre la economía y la política, entre la técnica y el humanismo, entre el corto plazo y la mirada al futuro.
