Cuando regresó Miguel de Unamuno del exilio -forzoso- de la isla de Fuerteventura, pronunció al recuperar su cátedra en la Universidad de Salamanca, ésta lapidaria frase: "Decía, ayer..."
Hoy, este articulo hace el numero redondo de "50", y es que me parece que fue ayer, cuando "colgué" mi primera palabra sobre este papel de cristal. Fue el 14 de junio del presente año, han pasado exactamente 140 días, como soy de números, dividiendo entre "50", nos dan 2,80 más o menos a 1 artículo cada 3 días.
Pero, hagamos una pequeña historia de como llegue hasta aquí (AM). Cuando esto solo era un embrión/proyecto el otoño pasado, me asomaba a éste medio digital, como lo están haciendo Uds. en este momento...leyendo. No crean que siempre tuvo este formato actual tan llamativo, lleno de ventanas (enlaces), las fotos destacaban por su ausencia. Y hasta que no llego la pasada primavera, la pantalla era como la noche, negra. Tuvo en este casi un año, varias cabeceras, hasta llegar a la que hoy preside. El único que se mantuvo firme y nunca mejor dicho, al pie del cañón, es el padre de la criatura, Nacho. Y que entre risas/bromas en una tarde/noche, me dijo, mas o menos esto: "por qué, no te animas y escribes "algo"?." Seguro, que le dije, si.
Pero tuvieron que pasar unos meses hasta que le hice llegar, mi primer..."algo".
Ahora, que ya estoy inmerso en este maravilloso proyecto/aventura, me siento como si trabajara en una fabrica de palabras. Pero sin ataduras, ni horarios, y sino escribes...no pasa "na". Un duende (él), se encarga de tener todas las ventanas de la información abiertas, tanto de día como por la noche -debido a los horarios internacionales entre países- y como las agencias de prensa no paran de procesar noticias a nuestro -coordinador- no le dan tregua alguna. Es un profesional enorme, y no lo digo, por el tipo que tiene que salta a la vista. Eso sí, los "tirantes" los lleva con elegancia... (la próxima vez que nos veamos me correrá... a gorrazos!)
Se nota que estoy feliz, pues claro. Y me lo dicen, los que me tienen en sus enlaces de "favoritos", los que me cuelgan de sus "muros", por los "e.mail" recibidos, los "sms" que me llegan, alguna que otra llamada y en el "vis a vis". Algunos -amig@s- hasta se molestan, que esto me esta robando momentos que no puedo compartir con ellos y les digo que se asomen a esta ventana, pinchen mi foto y hallaran mi alma. En cada silaba impresa pongo todo mi cariño, ilusión y raro es que no saque a colofón -de vez en cuando- algún trozo de sus propias vidas.
Para mi escribir es como jugar al balón, como la hacia cuando era un niño, es decir, me hace disfrutar alegremente de la vida.
Espero alcanzar el "centenario" de "algos" para antes que llegue la próxima primavera. Aquí, les espero.
