Las gijonesas sufrieron para imponerse a un recién ascendido que vendió cara su derrota

El Biesca Gijón sumó tres puntos importantes en el partido disputado en Mata Jove ante un equipo recién ascendido, el Malleu (1-0) que visitaba por primera vez Gijón.

Se sabía de antemano que el conjunto catalán era muy difícil y que se estaba convirtiendo en la revelación de la temporada. No obstante las gijonesas pudieron poner tierra de por medio en los primeros compases del encuentro con diversas acciones de María Díez y de Sara González, que envió una bola al palo.

No obstante, en el minuto siete, el colegiado castigó con una falta directa al equipo asturiano que Laura Vall estrellaría en el poste. Las catalanas trataban de presionar arriba la salida de bola de las locales y planteaba una defensa en zona que poco a poco, atascó al Biesca. Además, la portera demostró estar en auténtico estado de gracia desbaratando las ocasiones de las biesquistas.

Parecía que se llegaría al descanso sin que el marcador se moviera, pero las rojinegras supieron jugar con mucho criterio la última posesión, seleccionado bien el disparo y Silvia Cadrecha desde el medio de la pista sorprendía a la zaga catalana consiguiendo anotar el gol que, a la postre, daría el triunfo a su equipo cuando faltaban solamente tres segundos para que llegara el descanso.

En el segundo periodo el Manlleu presionó mucho más al Biesca tratando de nivelar el marcador, pero la defensa se mostró muy segura y Christina Klein en última instancia abortaba las ocasiones de gol del conjunto catalán.

María Díez pudo incrementar la ventaja gijonesa en el lanzamiento de una directa, pero no acertaría en la acción y el marcador no se movió. Tampoco Sara acertaría a anotar el penalti provocado por Yolanda Font al desviar la bola con el patín dentro del área.

Con este decorado se llegaba a los minutos finales del partido y el Manlleu fue a por todo y llegó a acorralar a las locales en su área que se defendió con mucho sentido y cuando recuperaba la bola realizaba un hockey control esperando que el tiempo llegara a su final.

Ambos equipos llegaron a estos instantes finales con nueve faltas en su casillero y serían las catalanas las que cometerían la décima a falta de un minuto, y María Díez volvió a disponer de una ocasión para anotar al lanzar otra falta directa, pero tampoco en esta ocasiones acertaría. Al final, con explosión de júbilo de la parroquia local, los tres puntos se quedaron en Gijón.

Nada más finalizar el choque el Biesca emprendió viaje a Madrid donde se enfrentará hoy al Alcorcón.

FOTO: David 'Dekat' Hevia