El Parlamento exige la revisión de las obras del Castro del Chao Samartín

El Parlamento exige la revisión de las obras del Castro del Chao Samartín

  Concha Masa pide responsabilidad al Consejero de Cultura ante la alarma generada entre los especialistas   

 

El Parlamento asturiano rechaza el actual Proyecto de Consolidación del Castro del Chao Samartín, en Grandas de Salime, y pide a la Consejería de Cultura que recapacite, estudie y modifique las intenciones del Ayuntamiento para ejecutar unas obras con procedimientos muy agresivos e irreversibles en el principal yacimiento castreño de todo el Noroeste. La iniciativa, a propuesta de IU, fue apoyada por todos los grupos parlamentarios a excepción del socialista, partido que gobierna en el municipio. 

La diputada de IU Concha Masa subrayó que de llevarse a cabo este proyecto las “previsiones son nefastas” y pidió responsabilidad al Consejero de Cultura ante la alarma generada por el mismo en las autoridades científicas y especialistas castreños. Es más la diputada de IU solicitó que se paralicen temporalmente las obras, solicite los informes preceptivos de expertos y vuelvan a llevar de nuevo a Patrimonio las modificaciones.

“Este patrimonio, que presenta un panorama histórico excepcional en la historia de la comunidad autónoma es una gran joya y vale más aplazar la obra   un tiempo que llevarla a cabo sin garantías suficientes”, aseguró desde el estrado  de la Junta General. Masa, que recordó las múltiples intervenciones y la preocupación parlamentaria que han suscitado las actuaciones en el Castro Chao Samartín desde hace dos legislaturas, advirtió que el proyecto pretende dar más interés al aspecto turístico, “un parque turístico para visitantes ignorantes” en vez de cuidarlo como fuente de investigación y conocimiento de la cultura.

Masa reiteró las denuncias ya hechas públicas, porque el proyecto incluye  levantar los muros derruidos por un terremoto, cuya constatación constituyen una singularidad histórica en la comunidad, y como si fuese una casa, utilizando materiales de gran agresividad, como el hormigón,  y difíciles de contrarrestar y recuperar en un futuro.

También la construcción de una rampa de acceso o la construcción de un aula de acogida, justo a la entrada del castro donde todavía hay terreno arqueológico fértil. Del mismo modo citó la ausencia de un estudio de impacto arqueológico, la realización del proyecto al margen de los investigadores que llevan décadas trabajando en el mismo o su proyección sin respetar las Cartas de Cracovia o Venecia, que guían los principios internacionales para la conservación y restauración del patrimonio construido.  

La literalidad de la moción subsiguiente aprobada esta mañana expresa: La Junta General del Principado insta al Consejo de Gobierno para que recabe las memorias e informes preceptivos de profesionales especializados en la conservación, restauración e investigación arqueológica de ámbito protohistórico y antiguo al objeto de valorar el Proyecto de consolidación del yacimiento arqueológico del Chao Samartín y  a convocar al Consejo de Patrimonio Cultural de Asturias para que, en su caso, y teniendo en cuenta los informes que se elaboren, proceda a la revisión del acuerdo por el que fueron autorizadas las obras y el proyecto de consolidación del yacimiento arqueológico castro de Chao Samartín, promovido por el Ayuntamiento de Grandas de Salime. 

Los argumentos utilizados por el resto de partidos que apoyaron la moción son similares a los de IU. Pedro de Rueda del PP sostuvo que el proyecto  es “un despropósito de tal calibre que es difícil de entender”, realizado por arquitectos y sin que cuente con el preceptivo informe arqueológico.

Pedro Leal de Foro apoyó por la desconfianza “que genera el Principado en todo lo referido con el Castro del Chao Samartín, al igual que lo que genera el Ayuntamiento de Grandas de Salime”. Lucía Montejo tildó de “auténtico atropello y atentado” contra el patrimonio cultural asturiano el proyecto   y    recordó que el equipo de investigadores fue echado del yacimiento por sus desavenencias con el alcalde. 

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