Estos productos deben almacenarse en lugares altos, fuera del alcance y de la vista de los pequeños

• La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) y la Comisión Europea impulsan una campaña informativa mundial sobre los potenciales riesgos derivados del uso incorrecto de las cápsulas de detergente líquido. Estos productos se presentan en dispensaciones que, por sus formas y colores, resultan atractivas para los niños, que pueden jugar con ellas o confundirlas con juguetes o caramelos.

El Servicio de Consumo del Principado recuerda que estas cápsulas contienen detergente líquido concentrado que se libera cuando entran en contacto con el agua, dado que la membrana que las recubre es hidrosoluble. Por esta razón, si la cápsula está mojada o húmeda, puede disolverse en la mano de un niño o en su boca en menos de 10 segundos y ocasionar graves lesiones.

Para evitar accidentes, se recomienda a los consumidores que guarden estos productos en un lugar alto, fuera del alcance y de la vista de los niños. Si se almacenan en estantes inferiores accesibles, deben permanecer cerrados con candados o pestillos. Las cápsulas han de mantenerse en su envase original, con la tapa cerrada. 

Los daños que puede provocar el detergente van desde conjuntivitis a erupciones, irritaciones y quemaduras. En caso de ingestión, puede causar vómitos severos, tos, problemas respiratorios, náuseas, somnolencia y erupciones. La parte expuesta debe lavarse con agua abundante.

Si el niño introduce la cápsula en la boca es necesario lavársela cuidadosamente y ponerse en contacto con el centro de salud o el Servicio de Información Toxicológica, en el teléfono 915620420.

Anualmente, más de 16.000 personas, principalmente niños, se ven afectadas por intoxicaciones producidas por la incorrecta manipulación de estas cápsulas de vivos colores. En 2013 se registraron en España 299 casos, la mayoría en el ámbito doméstico.