Las cofrades de Doña Gontrodo, en torno a la Merluza a la Sidra del Restaurante El Nalón

Las cofrades de Doña Gontrodo, en torno a la Merluza a la Sidra del Restaurante El Nalón

Por Malullaco.-En la restauración ovetense siempre hubo una serie de platos referentes,  que fueron estrella de los restaurantes que los elaboraron y que se quedaron para la historia, aunque la mayoría de los negocios ya hayan desaparecido. Tal es el caso, por ejemplo, de la fabada o la merluza a la romana de Casa Modesta, la perdiz con verdura del bar Casa Manolo, la cabeza de merluza de Casa Lito, el cachopo del Bar Pelayo, la tortilla de setas de La Quirosana, la tortilla de merluza de Casa Banco  el Biscuit glasé del Hotel Principado….etc. etc.

          Toda una serie de referencias gastronómicas que dieron prestigio a la gastronomía local y que persisten en el transcurrir del tiempo.

         Ocurre tal cosa, con la famosa  “merluza a la sidra de El Nalón” que salió a la carta en el año 1.963 y continúa en ella en los tiempos actuales.

         Para hablar del encuentro gastronómico de la Cofradía Doña Gontrodo del mes de marzo, es preciso hacer un preámbulo, con la historia del restaurante que las acogió en esta ocasión.

         El bar Restaurante El Nalón,  está ubicado en la calle Fray Ceferino de nuestra ciudad y regentado por Vicente hijo y su esposa, como sucesores de Vicente y Esmeralda, que abrieron el local en el año 1.963, atendiendo el bar el primero y ocupándose de la cocina Esmeralda.

         Por tanto, la verdadera artífice del famoso plato de merluza del pinchu cocinada con sidra asturiana, no fue otra que Esmeralda. Su receta la guardó siempre con gran celo, después de haber pasado a la posteridad. No en vano, nuestro Nobel Camilo Cela, la nombró en su día, como “la reina de merluza a la sidra, desde su trono del Bar El Nalón”

          Pero Esmeralda González, tiene otra faceta artística que es la pintura, habiendo expuesto en distintas localidades españolas y figurando su muestra en colecciones privadas de Nueva York, París y México.

          No tiene nada de extraño por tanto, de que el Ayuntamiento de Oviedo, haya otorgado la “Medalla en el Trabajo” a esta relevante ovetense, nacida en San Esteban de las Cruces y que es cofundadora del Club de Guisanderas, esa asociación de mujeres de la profesión, que reivindican el matriarcado que imperó siempre,  en la cocina tradicional asturiana.

         Y ahora si que hablaremos del encuentro de Doña Gontrodo, cuya mayoría de las  cofrades,  no había probado el famoso plato y acudieron  a la cita, ávidas de saborearlo.

         Estuvieron allí: Raquel, Mariló, María Victoria, Cheres, Mari Carmen, Margarita, Pilar, Silvia, María Luisa, Estela, Cari, Elena, M.L.Bengoa.

Aunque Silvia es aspirante, acudió como una cofrade más.

         Magníficamente atendidas, tomaron en primer lugar unos cogollos de lechuga aderezados y acompañados de bonito y anchoas.

         Después, vendría el plato estrella,  que les causó buena sensación y  elogios.

         Se finalizó la comida con postres caseros.

          Se sirvió vino blanco y tinto de la casa, agua mineral y cafés.

         El precio del menú, estuvo equilibrado y razonable con la calidad.

 

         Como siempre, al final hubo el acto protocolario de la entrega del cuadro que acredita el paso de la cofradía por la casa.

         Lo recibieron Vicente y su esposa, de manos de Cari y María Luisa, en representación de todas.

          Se despidieron, después de haber disfrutado de la buena  comida, en este templo de la cocina tradicional asturiana.

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