Vengo observando de un tiempo para acá cómo las multinacionales, o mejor dicho, los grupos de inversión extranjeros se están introduciendo en nuestra autonomía a base de hacerse con el capital de nuestras principales industrias. ¿Bueno o malo?. Lo que si es cierto es que les atrae la tradición industrial de nuestra región, sin rumbo fijo desde que la empresa pública se vino abajo, además de carecer Asturias de una clase financiera y otra empresarial ya que al fin y al cabo en manos asturianas, salvo excepciones, queda la pequeña y mediana industria y en varios casos de tipo familiar con horizonte de sucesión no resuelto.
Me alegro que la Fundición Modular en Lugones vuelva a la actividad de manos de un grupo inglés. Fabricante de cilindros para laminación llegó a estar a la cabeza del mercado europeo hace años. Alas Aluminio está a punto de arrancar en manos de un grupo argelino. Arcelor Mittal, Telecable, EDP, Du Pont, la primera en llegar, los propietarios de la planta de celulosa en Navia, del oro en Belmonte, minoritarios en Duro Felguera… todos estos grupos extranjeros quieren chupar en el buen sentido de la palabra el jugo a Asturias mientras la patronal oficial pide mejores comunicaciones y más ayuda pública y es que estamos en un mundo global y sin fronteras. Asturias contará con casi 4.000 millones de euros como presupuesto para el próximo año pero las instituciones, comenzando por la Universidad, se quejan de lo escaso del pastel. Dentro de la línea que caracteriza a nuestra sociedad y al equipo gobernante, el PSOE, el 67 por ciento del presupuesto tiene fines sociales con la sanidad, la educación y la dependencia a la cabeza. Para inversión, muy poco. Fíjense que la mayor partida de la consejería de Fomento son 13 millones de euros para el soterramiento de las vías del FEVE a su paso por Langreo, obra que tendría que pagarla el Estado con cargo a los fondos mineros y que tampoco es, díagase lo que se diga, determinante para el desarrollo de la zona central del Principado.
La verdad es que algún atractivo debemos de tener para los capitales de fuera que hasta el fútbol es objeto de sus deseos. El Real Oviedo está en manos del grupo CARSO del mexicano Carlos Slim con inminente entrada también de uno de sus socios, una compañía china que ha adquirido en Asturias la firma TEMPER. El Sporting está a punto de caer en manos de un grupo inglés, quien lo diría, y hasta el Real Avilés es ya propiedad de un escocés.
Hablando de fútbol estoy consternado por lo ocurrido esta mañana en Madrid con motivo del partido Atlético de Madrid/Coruña. A primera hora, en lo aledaños del estadio Vicente Calderón hubo graves enfrentamientos entre radicales de una y otra afición con un ciudadano gallego debatiéndose entre la vida y la muerte en un hospital madrileño tras haber sido objeto de una brutal paliza tras la cual le tiraron al río Manzanares. Hay además decenas de heridos. Por lo visto durante la semana los radicales se habían citado en el parking a través de las redes sociales; sin embargo la policía no reaccionó. Tarjeta roja para la delegada del Gobierno Cristina Cifuentes, últimamente más preocupada en ir por los platós de las televisiones cara a su futuro político -¿Quizás candidata a la presidencia de la comunidad de Madrid?- que de ejercer sus funciones. En todo caso lo que esta mañana ha ocurrido en las inmediaciones del Vicente Calderón -el partido estuvo a punto de suspenderse- es una muestra más de lo enferma que esta nuestra sociedad.
No quiero terminar este comentario dominguero sin felicitar a la dirección del SOMA tras ganar claramente las elecciones para delegados sindicales en HUNOSA. El nuevo secretario general del sindicato minero ugetista, José Luis Alperi, ingeniero técnico y en la compañía desde 1996, está haciendo una muy buena labor máxime tras el affaire de su antecesor José Angel Fernández Villa. El SOMA logró en HUNOSA 42 de 68 delegados mientras que CCOO obtuvo 21, la Federación de Cuadros 4 y USO 1. Habrá que celebrar Santa Bárbara antes de que cierre a finales de mes el pozo Sotón..