En una reunión celebrada esta tarde en el Ayuntamiento, miembros de la iniciativa “Imagina un Bulevar” han comunicado a los concejales Gerardo Antuña (PP) y Roberto Sánchez (IU) la decisión de su colectivo de dar por finalizada la participación del Equipo de Gobierno en su proyecto colaborativo para la regeneración urbana de la entrada a Oviedo por la antigua autopista Y, a causa de sus intentos de manipulación del proceso y a los constantes incumplimientos de los compromisos previstos en la hoja de ruta acordada a finales del mes de abril, cuyo objetivo era facultar a la ciudadanía ovetense para decidir directamente y a través de un referéndum la operación urbanística más ambiciosa que ha enfrentado la ciudad en décadas.
El 10 de abril del presente año, “Imagina un Bulevar” presentó a todos los grupos políticos municipales su propuesta de proceso participativo para convertir el tramo urbano de la antigua Y en un espacio abierto, integrador y al servicio de las necesidades de los barrios vecinos, a desarrollar en varias fases, y que culminaría con la celebración de una consulta ciudadana para elegir un anteproyecto de los tres preseleccionados por un jurado técnico en un concurso internacional de ideas. La propuesta mereció el apoyo unánime de la Corporación, y el Equipo de Gobierno municipal se sumó a su ejecución en el marco del acuerdo presupuestario alcanzado a finales de diciembre de 2013 entre el Partido Popular e Izquierda Unida, comprometiéndose a poner en marcha el concurso antes de noviembre del 2014, para no coincidir la votación popular con las elecciones municipales de mayo del 2015, y utilizar para tal fin la partida municipal destinada a “imagina un bulevar”.
Entre los días 5 y 8 de junio tuvo lugar la primera fase del proceso, las Jornadas de Urbanismo y Participación Ciudadana, organizadas conjuntamente por “Imagina un Bulevar” y el Ayuntamiento de Oviedo, en las cuales el numeroso público asistente tuvo oportunidad de comprobar, a través de casos similares en otros municipios, cómo es posible construir la ciudad desde las necesidades y aspiraciones de la ciudadanía, expresadas a través de procesos participativos. Todo fueron alabanzas y buenas palabras por parte de los concejales asistentes; incluso el propio Alcalde Agustín Iglesias Caunedo recibió el 3 de julio a miembros de la iniciativa y les reafirmó su compromiso personal -ya manifestado públicamente- con el proceso de participación.
Las cosas empezaron a torcerse en la siguiente fase, los talleres abiertos celebrados los días 26 y 27 de septiembre, cuyo objeto era establecer colaborativamente la problemática y necesidades a abordar por los equipos participantes en el concurso de ideas para el Bulevar y los criterios a adoptar para resolverlas. La primera jornada transcurrió con normalidad, pero la sospechosa irrupción a última hora de un numeroso grupo que defendía unánimemente el soterramiento de la autopista -una opción que hasta entonces había recibido un apoyo testimonial-, hizo saltar las primeras alarmas. A pesar de todo, estas maniobras no consiguieron neutralizar el consenso inequívoco alcanzado al término de los talleres en favor del Bulevar: menos coches, más zonas verdes y conexión entre los barrios en condiciones similares al resto de la ciudad.
Comenzó entonces una larga y ardua negociación de los términos del pliego de bases del concurso de ideas, en cuyo transcurso fueron desvelándose las verdaderas intenciones del Equipo de Gobierno: posibilitar, no sólo en contra del consenso mayoritario, sino también de la sensatez económica y de la racionalidad técnica, que propuestas de soterramiento de la autopista pudieran resultar premiadas. “Imagina un Bulevar” mantuvo su oposición por resultar contraria al objetivo inicial del proceso y rechazó el intento de manipulación de que estaba siendo objeto.
Después de numerosas reuniones celebradas y ante los continuos bloqueos unilaterales, los impedimentos técnicos arbitrarios y las dilaciones injustificadas que amenazaban con alargar eternamente el proyecto, en la reunión celebrada el pasado 15 de diciembre “Imagina un Bulevar” reclamó al concejal Gerardo Antuña un calendario viable para asegurar que el proceso concluyese durante el presente mandato municipal y que el referéndum popular se celebrase antes del inicio de la campaña electoral. A fecha de hoy, esa demanda sigue sin tener respuesta, quedando también bloqueada y sin utilización la partida presupuestaria del 2014 destinada al proceso participativo.
Estos hechos demuestran el intento del gobierno del Partido Popular en el Ayuntamiento de manejar el proceso de participación de acuerdo con sus propios intereses y de utilizar la participación ciudadana sólo para revestir su propuesta política con un falso barniz de modernidad. Un artificio que ya no consigue engañar a los vecinos y vecinas de Oviedo que cada vez con más insistencia demandan decidir directamente cómo ha de ser el entorno en el que se desenvuelven sus vidas. El discurso de Iglesias Caunedo ha resultado ser una sucesión de frases hechas y de palabras huecas para ocultar su propósito de resucitar subrepticiamente el descabellado proyecto de losa de Santullano.
Para las personas que integramos “Imagina un Bulevar”, no ha sido una sorpresa. La verdadera participación significa transferir progresivamente la capacidad de decidir desde una élite presuntamente representativa hacia la gente, y así empoderarla para que pueda ejercer plenamente su libertad y soberanía; una visión, como se ha demostrado, ajena al ideario político del partido en el gobierno municipal. Pero nosotros no elegimos los tiempos ni los pactos alcanzados por las minorías gobernantes y, aun con todas las reservas, teníamos que explorar esa opción y apurar su recorrido. Hoy decidimos denunciar públicamente los engaños y manejos del actual Gobierno Municipal de Oviedo y damos así por terminada su participación en nuestro proyecto, que no es propiedad de ningún partido político sino patrimonio de la ciudadanía de Oviedo, y que después de más de dos años sigue adelante sumando apoyos de colectivos y organizaciones contra la imposición de los intereses de unos pocos y en favor del protagonismo de la mayoría social.
