Cucharon del Buen Guiso Marinero, XXXI edición.

Cucharon del Buen Guiso Marinero, XXXI edición.

La ejemplar Cofradía de la Buena de la Mesa, celebró el 28 de octubre de 2016, la edición treinta y uno, de la entrega de su galardón más emblemático, el “Cucharón del Buen Guiso Marinero”, en sus tres categorías: regional, nacional e internacional.

 

 

 

 

 

 

Edición que siguió el protocolo de ediciones anteriores, comenzando con la recepción a última hora de la mañana de los galardonados en su sede social de la Colonia, en Salinas, con la firma en el libro de honor de la Cofradía y posterior rueda de prensa.

Galardones que en su categoría regional, fue para el restaurante Arbidel, de Ribadesella, cuyo chef y propietario es Jaime Uz. En categoría nacional para el restaurante Ramón Freixa, de Madrid, cuyo chef y propietario le da nombre al establecimiento. Y en categoría internacional, fue para el restaurante Hispania, de Londres, cuyo chef y copropietario es Marcos Morán.

 

 

 

De izquierda a derecha: Vicente Quintanilla -presidente anfitrión-, Jaime Uz, Marcos Morán, Ramón Freixa, Tito Gómez -presidente de la comisión de los Cucharones- y Ovidio García -miembro de la Mesa Mayor de la Cofradía-.

 

 

 

Seguidamente se celebró la habitual comida entre los galardonados, miembros de la Mesa Mayor de la Cofradía y de la crítica especializada, en Casa Gerardo, cuyo copropietario Pedro Morán, se mostró complacido de dar por primera vez de comer a su hijo, galardonado con el distintivo internacional, y por que por también por primera vez en su tierra natal se les reconocía el trabajo realizado allende las fronteras.

 

 

 

 

 

 

 

 

Ya en la noche, el restaurante el Balneario, en Salinas, acogió el acto oficial de entrega y la cena de hermandad con todos los cofrades, autoridades e invitados.

 

 

 

 

 

 

 

Acto con especial protagonismo de los distinguidos y de los miembros de la Mesa Mayor de la Cofradía. José Antonio Villabrille, vicepresidente, ejerció de maestro de ceremonias; Tomás Badiola, secretario, dio lectura al acta de la reunión en el que se acordaron los nombramientos; José Antonio Soto-Jove, en su calidad de notario tomo juramento a los galardonados y el presidente anfitrión Vicente Quintanilla, entregó los galardones y cerró el acto.

 

 

 

José Antonio Villabrille, maestro de ceremonias.

 

Lectura del acta por parte de Tomás Badiola.

 

José Antonio Soto-Jove, tomando juramento a Jaime Uz.

 

Vicente en la entrega correspondiente a Ramón Freixa.

 

 

 

Eufrasio Sánchez, crítico gastronómico, glosó la figura de Jaime Uz, propietario y cocinero del restaurante Arbidel, en Ribadesella. Establecimiento que regenta desde el año 2009 y que cuenta con una estrella de la guía Michelin desde el año 2014, al que calificó como un creativo que une pasión y tradición, puro inconformismo, que está en la vanguardia de la cocina asturiana.

 

 

 

 

 

 

 

 

Como suele suceder en las últimas ediciones, Pedro Morán, fue el encargado de glosar la figura del premiado en la categoría nacional. De su amigo Ramón Freixa, reconocido por toda la crítica como uno de los grandes del país, contando su establecimiento con dos estrellas Michelin y tres soles Repsol, de quién destaco su bonhomía, definiéndolo como un cocinero perfeccionista y divertido, felicitándolo por haber nacido cocinero.

 

 

 

 

 

 

Por último el doctor Francis Vega, amigo personal de la familia Morán, glosó al galardonado con el Cucharón Internacional, el restaurante Hispania, que abrió sus puertas en el año 2013, cuyos propietarios son cinco asturianos, y que encabezan Marcos Morán y Javier Fernández Hidalgo, presentes en el acto.

 

 

 

 

 

 

Definió el oficio de cocinero como duro y competitivo, destacó la formación y técnica de Marcos, su personalidad y su criterio de caminar y no correr, congratulándose que la cocina asturiana tenga en la City de Londres, al lado del Banco de Inglaterra, y próximamente en Bruselas, en el restaurante Hispania a un espléndido embajador.

 

 

 

 

 

 

Vicente Quintanilla, que entrego a cada galardonado la visera e insignia de la Cofradía, así como el diploma acreditativo y el cuadro con el Cucharón, a la conclusión de sus intervenciones, cerró el acto felicitando a los galardonados y a los miembros de la comisión que los eligieron, destacando su figura y que se suman a una ya muy larga lista de galardonados, entre los que están lo más granado de la gastronomía regional e internacional.

 

 

 

 

 

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